Reportaje

«El VIH no puede abordarse de forma aislada»: Comisión sobre el Sida en el Pacífico

02 de diciembre de 2009


Misa Telefoni Retzlaff, Presidente de la Comisión sobre el Sida en el Pacífico, entrega un regalo conmemorativo al Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, con ocasión del lanzamiento del informe  “Invertir la tendencia: una estrategia ABIERTA para una respuesta al sida en el Pacífico”. Nueva York, 2 de diciembre de 2009.
Fotografía: ONUSIDA/B. Hamilton

Una Comisión Independiente sobre el Sida en el Pacífico recomienda que el VIH no puede abordarse de forma aislada: debería considerarse en el contexto global del desarrollo de la región. Ésta es una de varias recomendaciones que se desprenden del informe que ha emitido hoy el Secretario General Ban Ki-moon en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York.

Titulado Invertir la tendencia: una estrategia ABIERTA para una respuesta al sida en el Pacífico, el informe esboza los retos fundamentales que están bloqueando la respuesta al sida en el Pacífico y plantea pasos decisivos que deberían dar los países de la región para proteger sus sociedades, culturas y economías frente al VIH.

Además, el informe señala que una respuesta de tipo «uno sirve para todo» no encaja con la diversidad de los países del Pacífico, y que la legislación anacrónica que penaliza la homosexualidad y el comercio sexual es un impedimento importante en la región.

Los gobiernos, la sociedad civil y las personas que viven con el VIH deben unirse para ampliar progresivamente un movimiento contra el sida que esté informado por pruebas y fundamentado en los derechos humanos.

Michel Sidibé, Director ejecutivo de ONUSIDA

«Las leyes punitivas constituyen un obstáculo significativo para la prevención eficaz del VIH y la respuesta al sida», ha indicado el Secretario General de las Naciones Unidas Ban Ki-moon. «Debemos defender los derechos de todas las personas que viven con el VIH. En particular, los países de la región deben revocar las leyes que alientan el estigma y la discriminación contra los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, los profesionales del sexo y los consumidores de drogas inyectables.»

Al comentar la publicación del informe, el Director Ejecutivo del ONUSIDA Michel Sidibé ha dicho que la región del Pacífico tiene una oportunidad única para alcanzar el acceso universal a la prevención, tratamiento, atención y apoyo relacionados con el VIH. «Los gobiernos, la sociedad civil y las personas que viven con el VIH deben unirse para ampliar progresivamente un movimiento contra el sida que esté informado por pruebas y fundamentado en los derechos humanos», ha declarado el Sr. Sidibé. «La respuesta al sida debe convertirse en un catalizador para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio en la región.»

Compuesta por algunos de los países más pequeños, más aislados y menos desarrollados del mundo, la región del Pacífico abarca un tercio de la superficie del planeta y representa tan sólo el 0,14% de la población mundial, con una proporción similar de la carga del VIH en todo el mundo. Sin embargo, en los países del Pacífico, incluso un pequeño número de personas que vivan con el VIH puede traducirse en tasas elevadas de incidencia y prevalencia.

20091202_PacificRao_200.jpgPrasada Rao, Director regional de ONUSIDA, en el lanzamiento del informe que fue publicado por la Comisión Independiente sobre el Sida en el Pacífico. Nueva York, 2 de diciembre 2009.
Fotografía: ONUSIDA/B. Hamilton

Los países del Pacífico se incluyen a menudo en agrupaciones regionales amplias de Asia-Pacífico, en las que la magnitud del problema en los países asiáticos oscurece los retos y necesidades de los países más pequeños del Pacífico.

Estas realidades sobre la región condujeron a la constitución, en octubre de 2007, de una Comisión Independiente sobre el Sida en el Pacífico para examinar la escala actual de la epidemia de VIH en la región.

Incidencia del VIH

Los países del Pacífico se encuentran en diferentes fases para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio, pero el informe señala que es improbable que alguno de ellos cumpla todos los objetivos de salud para 2015.

Se han notificado 29.629 casos de personas que viven con el VIH en el Pacífico, con 5.162 nuevos diagnósticos de VIH comunicados en 2008.

Papua Nueva Guinea tiene la cuota más alta de casos, que ha ido creciendo exponencialmente desde el 21% en 1984-1989 hasta más del 99% en 2008. Reported Los casos notificados en Papua Nueva Guinea totalizan 28.294, pero el ONUSIDA estima que hay 54.000 personas que viven con el VIH. Se calcula que, en 2012, Papua Nueva Guinea tendrá una tasa nacional de prevalencia del 5,07% y un total de 208.714 personas infectadas por el VIH.

Las relaciones sexuales no protegidas constituyen el modo predominante de transmisión del VIH en la región. El número de jóvenes VIH-positivos está aumentando progresivamente, y las mujeres jóvenes se infectan antes que los hombres jóvenes. Nueva Caledonia, la Polinesia Francesa y Guam han identificado las relaciones sexuales no protegidas entre hombres y el consumo de drogas inyectables como impulsores fundamentales de sus epidemias.

La respuesta del Pacífico

20091202_Pacific2_200.jpg “Invertir la tendencia: una estrategia ABIERTA para una respuesta al sida en el Pacífico”

Entre 2001 y 2009, la financiación para programas sobre el VIH en la región se multiplicó por más de cinco, hasta alcanzar US$ 77 millones en 2008. La ejecución de programas sobre el VIH en el Pacífico acarrea un costo elevado a causa de la diversidad cultural y lingüística, las redes de transporte caras y limitadas y la mala infraestructura de comunicaciones.

Aunque la Comisión encomendó a los líderes del Pacífico que actuaran de inmediato para apoyar la respuesta al sida, también señaló que el conocimiento de la epidemia sigue siendo limitado a causa de las deficiencias en los sistemas de vigilancia y recopilación y análisis de datos.

La respuesta al sida en el Pacífico deparará un mayor beneficio si se centra en las relaciones sexuales no protegidas y otros comportamientos de alto riesgo, más que en grupos de la población, observó la Comisión.

Puesto que los vínculos familiares y confesionales son capitales en la vida en el Pacífico, cualquier esperanza de éxito al afrontar la epidemia depende de la integración de las respuestas al VIH con estas estructuras sociales. El informe también recomienda reforzar la respuesta mediante una mayor participación de las personas que viven con el VIH en cuestiones de formulación de políticas y ejecución de programas.

«El sida en el Pacífico no debería considerarse como una carga que está desviando recursos de otras prioridades», ha declarado el Honorable Misa Telefoni Retzlaff, Presidente de la Comisión sobre el Sida en el Pacífico, que ha presentado el informe junto con el Secretario General. «El sida es una oportunidad para el desarrollo y para abordar las desigualdades, disparidades e injusticias en nuestras sociedades.»