Reportaje

El tratamiento y el diagnóstico precoz salvan a los bebés de una muerte relacionada con el sida

27 de mayo de 2009

Una versión de este reportaje se publicó anteriormente en UNICEF.org

20090528_staticimage_370.jpg

Alto y claro
, el vídeo de "Unidos por la infancia, unidos contra el sida" muestra cómo el diagnóstico precoz del VIH puede salvar vidas.

Muchos niños mueren sin motivo en todo el mundo debido a que no se les realizan las pruebas de detección del VIH con la suficiente rapidez, ni se les trata cuando tienen el virus. Sin tratamiento, la mitad de los bebés que viven con el VIH no vivirá lo suficiente como para ver su segundo cumpleaños, y un tercio no llegará a cumplir un año.

Para ayudar a hacer frente a esta situación, la campaña "Unidos por la infancia, unidos contra el sida" ha lanzado un nuevo vídeo en el que se subraya la importancia del tratamiento y el diagnóstico precoz para salvar las vidas de bebés seropositivos.

Como el vídeo "Alto y claro" muestra, los bebés diagnosticados y tratados de una forma precoz tienen una probabilidad mucho mayor de sobrevivir que aquellos que no lo están. Varias investigaciones han demostrado que si a los neonatos se le realizan las pruebas a las seis semanas de nacer y reciben tratamiento durante doce semanas, la mortalidad infantil relacionada con el sida se puede reducir hasta en un 75%..

Sin embargo, según un informe publicado el año pasado por UNICEF, ONUSIDA y la OMS, en 2007, solo al 8% de los niños con madres VIH-positivas se le realizaron las pruebas antes de los dos meses de edad. La mujeres, por su parte, pueden prevenir la transmisión del virus, y proteger así su salud, realizándose las pruebas del VIH y recibiendo tratamiento durante el embarazo.

Acceso a la atención y el tratamiento

Desde el lanzamiento de la campaña mundial "Unidos por la infancia, unidos contra el sida" en 2005, se ha producido un progreso significativo en la ampliación de las medidas de prevención de la transmisión maternoinfantil del VIH y en la provisión de tratamiento pediátrico para los bebés que nacen con el virus.

En 2007, un tercio de las madres embarazadas VIH-positivas recibió medicamentos antirretrovíricos para prevenir la transmisión a sus hijos. En 2004, solo los recibió un 10%.

Sin embrago, todavía hay un gran número de mujeres embarazadas en el mundo en desarrollo que no conoce su estado serológico, y muy pocas se realizan las pruebas o reciben tratamiento, y ambas cosas son esenciales para la salud de la madre y el hijo. Además, la mayoría de las mujeres embarazadas a las que se le ha diagnosticado el VIH no tiene acceso a la atención y el tratamiento adecuados, entre los que se incluye la terapia antirretrovírica.

"Las madres deberían tener acceso a las pruebas y los medicamentos necesarios para garantizar que tanto ellas como sus bebés están protegidos", declaró la Dra. Doreen Mulenga, Asesora superior sobre VIH y sida de UNICEF. "Los antirretrovíricos pueden reducir sustancialmente el riesgo que corre un bebé de contagiarse a través de su madre".

Niños en peligro

Los niños soportan una gran carga del virus. Las estimaciones de ONUSIDA y la OMS muestran que en 2007 unos 370.000 jóvenes de menos de 15 años se infectaron, lo que supone unas 1.000 infecciones al día; y unos 270.000 murieron, la mayoría con menos de 5 años. En ese mismo año, algo menos de 200.000 jóvenes seropositivos recibieron tratamiento antirretrivírico. Además, algunos de los que están bajo tratamiento lo empiezan demasiado tarde como para que se obtengan todos los beneficios: algunos estudios recientes muestran que la media de edad en la que los niños empiezan a recibirlo es de entre cinco y nueve años.

Grandes avances en Zambia

En Lusaka, la capital de Zambia, la clínica Chelstone proporciona programas vitales para tratar a las mujeres embarazadas que viven con el VIH y para prevenir la transmisión maternoinfantil. El país ha hecho grandes avances en la expansión de esos programas, entre los que se incluyen las pruebas del VIH durante el embarazo, los regímenes de medicamentos antirretrovirales para embarazadas seropositivas, los antibióticos profilácticos y los antirretrovíricos para los niños que estuvieron expuestos al VIH en el útero, amén del tratamiento y el diagnóstico precoz para los bebés.


20090523_UNICEF_200.jpg
Maureen Sakala, a quien le diagnosticaron VIH mientras estaba embarazada, practica cómo preparar la medicina antirretrovírica profiláctica para su hijo recién nacido, Christopher, en brazos de la comadrona Grace Kayumba en la clínica Chelstone en Lusaka, Zambia.
Fotografía: UNICEF/NYHQ2009-0307/Nesbitt

Christopher nació recientemente en la clínica de Chelstone y es hijo de Maureen Sakala, que vive con su madre, sus hermanos y 12 niños huérfanos, entre los que se incluyen los hijos de su hermano, que murió de una enfermedad relacionada con el sida.

La Sr. Sakala descubrió que era seropositiva durante una revisión prenatal. Desde entonces, participa en el programa de prevención de la clínica, donde aprendió a administrar los antirretrovíricos a Christopher durante los siete días posteriores al parto para prevenir la infección del niño. Sus posibilidades de supervivencia han aumentado sustancialmente debido al éxito del fortalecimiento de los servicios sanitarios para las madres, los neonatos y los niños en Zambia.

Prevenir que las madres mueran y que los niños se infecten por el VIH se ha convertido en una de las ocho áreas de prioridad en las que ONUSIDA y sus copatrocinadores se centrarán en el periodo 2009-2011 dentro de laAcción conjunta para conseguir resultados: Marco de resultados de ONUSIDA, 2009 - 2011

Al ampliar el acceso a las pruebas y el tratamiento del VIH, los socios de todo el mundo están trabajando para proteger a niños como Christopher y a sus madres de los efectos devastadores del sida.