Reportaje

Los programas de circuncisión masculina como parte de la prevención combinada del VIH son beneficiosos y rentables

08 de septiembre de 2009

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Según un nuevo artículo del periódico gratuito PLoS Medicine, la circuncisión masculina de los hombres heterosexuales que viven en entornos de alta prevalencia del VIH y donde esta práctica es poco común es beneficiosa y rentable.

Este estudio se basa en las conclusiones extraídas de una serie de reuniones organizadas por ONUSIDA, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Centro sudafricano para la elaboración de modelos y el análisis epidemiológico (SACEMA). En ellas se revisó el trabajo realizado en la elaboración de modelos, tanto aquel que está publicado como el que no, para calcular el impacto en la población y la rentabilidad a largo plazo de los programas de circuncisión masculina mediante la elaboración de modelos matemáticos.

Un grupo de expertos liderado por la Dra. Catherine Hankins, asesora científica principal de ONUSIDA, estudió un total de seis modelos. Dichos modelos preveían que, de aquí a diez años, se conseguiría evitar una infección por el VIH por cada cinco a 15 hombres que sean circuncidados. En las intervenciones más exitosas, en las que se circundaría prácticamente a todos los hombres, la incidencia del virus se podría reducir en el mismo periodo de un 30% a un 50%, y los patrones de prevalencia también acompañarían esta reducción.

El coste aproximado de la circuncisión masculina estaría entre $30 y $60 por adulto en función del lugar donde se practique, mientras que la circuncisión neonatal costaría una tercera parte. Los modelos también calculan que cada infección que se consiga evitar de aquí a diez años costará entre $150 y $900 en los entornos de alta prevalencia del VIH.

Todos los modelos confirmaron indirectamente que la mayor rentabilidad se dará en los entornos de mayor prevalencia del VIH. En comparación, se calcula que el coste de tratamiento de por vida del VIH normalmente supera los $7.000 por cada infección simplemente suministrando el tratamiento de primera línea, y el doble con el tratamiento de segunda línea. Por lo tanto, la circuncisión de los hombres sexualmente activos de cualquier edad probablemente ahorrará dinero.

Aunque diversos estudios han confirmado que la circuncisión masculina practicada por profesionales médicos cualificados reduce el riesgo de que los hombres adquieran el VIH al mantener relaciones sexuales con mujeres en aproximadamente un 60%, la gran preocupación que surge en los debates sobre esta práctica es que no protege directamente a la mujer del virus. No obstante, como compañeras sexuales y familiares de los hombres, las mujeres se benefician indirectamente de la reducción de la prevalencia entre sus compañeros circuncidados.

Sin embargo, la circuncisión masculina tiene un impacto mínimo a la hora de reducir la transmisión del VIH entre los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres.