Reportaje

Las leyes opresivas y las violaciones de los derechos humanos limitan el acceso de hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y transexuales a los servicios de atención y prevención del VIH en Asia y el Pacífico

21 de julio de 2010

Viena, 21 de julio de 2010 – En torno a 19 de los 48 países que conforman la región de Asia y el Pacífico siguen penalizando el sexo entre hombres, y estas leyes a menudo desembocan en abusos y violaciones de los derechos humanos. En consecuencia, la prevalencia del VIH ha alcanzado niveles alarmantes entre hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y poblaciones transexuales en muchos países de la región. Si estos países no consiguen abordar debidamente los derechos humanos y jurídicos en el contexto del VIH es muy probable que esta situación, ya es de por sí  crítica, empeore. Para responder de manera efectiva al VIH, los gobiernos deben tener en cuenta y hacer frente a los efectos que las leyes y su aplicación tienen en la salud de estos grupos.

Esta advertencia es una de las conclusiones principales del informe Legal environments, human rights and HIV responses among men who have sex with men and transgender people in Asia and the Pacific: An agenda for action [Entornos jurídicos, derechos humanos y respuestas al VIH entre hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y poblaciones transgénero en Asia y el Pacífico: Un programa de acción]. Encargado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Coalición de Asia y el Pacífico sobre la Salud Sexual Masculina (APCOM, por sus siglas en inglés), este informe y sus conclusiones principales se presentaron durante la sesión sobre la Penalización de las conductas homosexuales: Violaciones de los derechos humanos y obstáculos para la prevención efectiva del VIH y el sida en la XVIII Conferencia Internacional sobre el Sida, celebrada en Viena.

Este estudio descubrió que diversas leyes, como las de orden público y los delitos de mendicidad, se aplican selectivamente contra los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y los transexuales en muchos países de la región. Incluso cuando no existe penalización, la aplicación arbitraria e inapropiada de otras disposiciones jurídicas violan a menudo los derechos de estas poblaciones, obstaculizando así la promoción, la difusión y la prestación de servicios de salud y del VIH. El problema del acceso a los servicios del VIH fue un aspecto central en la decisión histórica del Tribunal Supremo de Delhi por la que afirmaba que la Sección 377 del Código Penal de la India discriminaba injustamente a los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres.

La existencia de leyes opresivas a lo largo de toda la región de Asia y el Pacífico, junto a su ejecución selectiva y discriminatoria, sigue reduciendo la efectividad de las respuestas nacionales al VIH. Según Jeff O’Malley, director de Práctica del VIH del PNUD, “los entornos jurídicos represivos institucionalizan la discriminación, limitan la financiación y dificultan en efecto que los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y las personas transexuales se protejan a sí mismos, sus familias, amigos y comunidades del virus. En el contexto del VIH y los derechos humanos, debemos seguir defendiendo y promoviendo con vigor las políticas y programas de salud,  desarrollo y  VIH que respeten los derechos, para lo cual es necesario eliminar las leyes opresivas y las prácticas discriminatorias”.

El estudio resaltó que hay algunos ejemplos recientes de leyes y acciones judiciales y políticas que pretenden mejorar el entorno jurídico para hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y transexuales, como diversas sentencias importantes que se han dictado en los tribunales de Nepal, la India, Pakistán, Filipinas, Fiji, Corea del Sur y la Región Administrativa Especial de Hong Kong. Sin embargo, estos son avances excepcionales y se debe por tanto mejorar los entornos jurídicos en todos los países.

 “Queda un largo camino por recorrer para garantizar que todos los ciudadanos de un país, independientemente de su orientación sexual o identidad de género, puedan acceder a los servicios sanitarios para evitar una infección innecesaria” afirmó Shivananda Khan, presidente de APCOM. “Es esencial por tanto establecer asociaciones y alianzas estratégicas entre las comunidades afectadas, la profesión jurídica, los órganos de derechos humanos, los parlamentarios, los responsables de formular políticas y los medios de comunicación”.

Muchas políticas nacionales del VIH conceden ahora cierta prioridad a los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, aunque el entorno jurídico siga siendo represivo. Unas 22 respuestas nacionales al VIH de la región de Asia y el Pacífico han identificado a los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres como una población prioritaria con relación a la prevención del VIH, mientras que cuatro países cuentan con planes estratégicos específicos o planes de acción para esta población (Camboya, China, Indonesia y la India). Asimismo, el Fondo mundial de lucha contra el sida, la tuberculosis y la malaria está financiando un programa regional multinacional sobre los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y el VIH en Asia meridional, que ya ha sido aprobado en siete países de la región.

El informe se puede descargar en: http://regionalcentrebangkok.undp.or.th/practices/hivaids