Reportaje

Explorando la prevención combinada: el camino a seguir

23 de julio de 2010

(from left) Ms Ruth Morgan Thomas, Global Coordinator for the Network of Sex Work Projects (NSWP); Dr Bernhard Schwartländer, Director of UNAIDS Department of Evidence, Strategy and Results.(desde la izq.) Ruth Morgan Thomas, coordinadora mundial de Network of Sex Work Projects (NSWP); Bernhard Schwartländer, director del Departamento de pruebas, estrategia y resultados. FotografíaONUSIDA/Anne Rauchenberger

Por cada dos personas que inician el tratamiento del VIH, cinco se infectan por primera vez. Puesto que la necesidad de centrarnos en prevenir el VIH es cada vez más apremiante, ¿cómo podemos dirigirnos a aquellos expuestos al riesgo de contraer el VIH para producir un impacto? ¿Cómo podemos ampliar la respuesta? ¿Cómo podemos coordinar las intervenciones para que se complementen unas a otras? Estas son algunas de las principales cuestiones que se analizaron en una reunión satélite de ONUSIDA celebrada dentro de la XVIII Conferencia internacional sobre el sida de Viena.

La sesión, titulada Prevención combinada en acción: enfoques adaptados, resaltó las necesidades de abordar la prevención en diversas poblaciones clave, como los profesionales del sexo y sus clientes, los usuarios de drogas inyectables, los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, las poblaciones en situación de crisis humanitaria y los migrantes.

Representantes del sistema de las Naciones Unidas y de la sociedad civil insistieron en la importancia de coordinar los esfuerzos de prevención del VIH y de solventar las deficiencias de la respuesta al sida a nivel nacional, regional y global. Intercambiaron experiencias y analizaron las lecciones aprendidas a la hora de tratar el VIH en poblaciones específicas. Asimismo, debatieron sobre las oportunidades y los retos que plantea la prevención combinada.

Purnima Mane, directora ejecutiva adjunta del UNPFA, inauguró los debates explicando que ONUSIDA aboga por un enfoque combinado de la prevención del VIH que tenga en cuenta las realidades de las epidemias locales. La prevención combinada necesita que se actúe tanto en los riesgos personales inmediatos como en los factores subyacentes que impulsan la epidemia. Significa asimismo adoptar una estrategia heterogénea que ofrezca servicios y programas a los individuos, así como invertir en intervenciones estructurales, por ejemplo, en reformas jurídicas que condenen la discriminación de las personas que viven con el VIH.

Satellite session: Combination prevention in action: targeted approaches.Sesión satélite: prevención combinada en acción, enfoques. Fotografía: ONUSIDA/Anne Rauchenberger

Presidida por Bernhard Schwartländer, director del Departamento de pruebas, estrategia y resultados de ONUSIDA, la sesión contó con diversos oradores, como Signe Rotberga, coordinadora de proyectos regionales de UNODC, quien compartió experiencias sobre la prevención del VIH y la atención para usuarios de drogas inyectables en instalaciones carcelarias de los estados bálticos.

El VIH y el trabajo sexual en situaciones de crisis humanitarias fue el tema principal que abordó el Dr.Patterson Njogu, coordinador mundial del VIH y el sida para la región de África oriental y el Cuerno de África, del ACNUR. Por su parte, Richard Howard, especialista regional en VIH y sida para Asia y el Pacífico, de la OIT, habló sobre cómo conseguir llegar a los clientes de los profesionales del sexo mediante intervenciones en el lugar de trabajo.

Ying-Ru Lo, de la OMS, explicó los procesos que se utilizan actualmente para desarrollar herramientas de orientación internacionales sobre la prevención y el tratamiento del VIH entre las poblaciones más expuestas al riesgo de infección.

Ruth Morgan Thomas, coordinadora mundial de Network of Sex Work Projects (NSWP), y Shona Schonning, de Eurasian Harm Reduction Network (EHRN), ofrecieron una visión clara de la labor de la sociedad civil en diferentes intervenciones.

Los participantes, de varios países y situaciones, compartían un objetivo común: reforzar la importancia de una prevención combinada adaptada que satisfaga las necesidades de los individuos y promueva la creación de un entorno seguro y de apoyo que se base en los derechos humanos, la protección y la reducción de la vulnerabilidad.