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El Sr. Pascal Canfin, ministro francés de Desarrollo (izquierda) se reunió con el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, el 5 de julio en París.
Fotografía: France MFA/Frédéric de La Mure

En la primera reunión con autoridades de alto nivel del nuevo gobierno del presidente François Hollande, el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, afirmó que deseaba una colaboración continua y fructífera entre el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) y Francia. Felicitó a los líderes franceses - pasados y presentes - por el compromiso de larga duración del país con la respuesta mundial al VIH y su apoyo en áreas clave, como el acceso al tratamiento, los derechos humanos y la corrección de las desigualdades sociales.

"Estoy animado por la visión del presidente Hollande sobre la respuesta mundial al VIH basada en la justicia social y la responsabilidad compartida", dijo el Sr. Sidibé, en sus reuniones con los funcionarios el 5 y 6 de julio en París.

En sus reuniones con tres altos funcionarios franceses: la ministra de Asuntos Sociales y Sanidad, la Sra. Marisol Touraine, el ministro de Desarrollo, el Sr. Pascal Canfin y un asesor diplomático del Presidente de la República, el Sr. Paul Jean-Ortiz, el Sr. Sidibé elogió el liderazgo francés por las importantes y constantes contribuciones del país a los mecanismos financieros innovadores en apoyo de la salud mundial.

En 2006 el gobierno de Francia desempeñó un papel decisivo en la creación de UNITAID, una organización multilateral que trata de ampliar el acceso a los fármacos contra el VIH, la tuberculosis y la malaria en los países con ingresos bajos y medios. Mediante un impuesto sobre los billetes de avión, UNITAID ha financiado el tratamiento contra el VIH para cientos de miles de personas que viven con el VIH, en gran parte en África. Francia financia cerca del 60% del presupuesto anual de la organización.

Francia tuvo además un importante papel en el establecimiento del Fondo Mundial de Lucha contra el Sida, la Malaria y la Tuberculosis, un organismo de financiación líder para los programas de lucha contra el VIH, la tuberculosis y la malaria. Desde su creación en 2002, los programas respaldados por el Fondo Mundial han facilitado tratamiento contra el sida para 3,3 millones de personas. Francia es el segundo país que más dinero dona al Fondo Mundial.

Impuesto sobre las transacciones financieras

Durante sus reuniones, el Sr. Sidibé elogió a los líderes franceses por la reciente decisión de introducir un impuesto sobre las transacciones financieras. "Ahora debemos convencer a los líderes mundiales de que adopten una medida similar y destinen una porción de los fondos recaudados a la salud y al desarrollo mundiales", dijo el Sr. Sidibé.  "ONUSIDA cuenta con los líderes franceses para que nos ayuden a hacer avanzar esta importante agenda", añadió.

El Sr. Sidibé indicó que un impuesto sobre las transacciones financieras - si se aplicara de forma general - podría resultar excelente para acabar con las carencias de financiación para el VIH en África, que se estima que es de entre 3000 y 4000 millones de dólares anuales. Un impuesto modesto, de solo el 0,01% de las transacciones financieras, podría generar miles de millones de dólares en ingresos entre los países del G20 sin aumentar la carga financiera para sus economías, afirmó.

Papel fundamental de la sociedad civil

Durante su estancia en Francia, el Sr. Sidibé se reunión con Jean-Luc Romero, presidente de la organización sin ánimo de lucro de lucha contra el sida, CRIPS, y jefe de la asociación de Funcionarios electos locales contra el sida. En la reunión, indicó que la respuesta al sida se ha beneficiado significativamente de la visión y el activismo de la sociedad civil. "Sin el compromiso de la sociedad civil, el progreso no habría sido posible", dijo el Sr. Sidibé.