Reportaje

El informe del UNFPA se centra en un enfoque de la planificación familiar basado en los derechos

14 de noviembre de 2012

El informe del Estado de Población Mundial 2012 se centra en la necesidad de más acción política y programática para asegurar que todas las personas tengan acceso a la planificación familiar.
Fotografía: UNFPA

El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) ha publicado el informe del Estado de la Población Mundial 2012 titulado “By Choice, Not by Chance”("Por decisión, no por azar"). La nueva publicación pone un nuevo énfasis en la necesidad de aumentar la acción política y programática para asegurar que todas las personas puedan acceder por igual a los servicios de planificación familiar, punto clave para que cada uno pueda ejercer sus derechos reproductivos.

Este enfoque basado en los derechos, dice el informe, podría ser la premisa para el marco mundial de desarrollo sostenible que cumpliría los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) de 2015.

Permitiendo que la persona elija el número de hijos y el espacio de tiempo entre ellos, la planificación familiar ha hecho posible que las mujeres y sus hijos vivan más y más sanos. Sin embargo, no todos pueden planear su vida sexual y reproductiva aún. El informe resalta que la sorprendente cifra de 222 millones de mujeres en edad fértil en países en desarrollo aún no tienen acceso a anticonceptivos modernos. Este hecho hace que tengan un riesgo más alto de contraer VIH. Las mujeres y niñas en edad fértil son las más afectadas por la epidemia de VIH en Zimbabwe, por ejemplo, y el VIH es responsable de en torno a una de cada cuatro muertes maternas. En Malawi, la falta de información, las largas distancias hasta llegar a los servicios y los proveedores poco amistosos contribuyen a unas tasas altas de embarazos no deseados y a la presencia del VIH entre adolescentes y gente joven.

A pesar de los compromisos internacionales para eliminar las barreras a la planificación familiar para todos los grupos de población, la investigación prueba que las necesidades de los jóvenes siguen pasándose por alto en gran medida. El informe apunta que la mayor generación de gente joven de la historia no es capaz de ejercer totalmente sus derechos reproductivos y prevenir embarazos no deseados, mitigar los riesgos del abandono escolar, o protegerse de infecciones de transmisión sexual, incluyendo el VIH.

Cada día, 2500 jóvenes, la mayoría mujeres, se infectan por el VIH, según el informe.

Los sistemas de planificación familiar desatienden a otros grupos de población importantes que, a veces, han de enfrentarse a barreras infranqueables: jóvenes, adultos solteros, personas separadas de sus parejas, hombres mayores, personas con discapacidad, refugiados, personas que viven con el VIH y minorías étnicas. Existe una necesidad imperiosa de proporcionar servicios sostenibles enfocados a estos grupos. El informe muestra que los costes de ignorar el derecho a la planificación familiar agravará la pobreza, la exclusión, los problemas de salud y la desigualdad de género.

Sin embargo, estos son signos de progreso. Viet Nam ha expandido sus servicios de salud reproductiva, por ejemplo, para incluir la planificación familiar, la atención pre- y posnatal y la prevención del VIH.

El pasado mes de julio, en la Cumbre de Londres sobre la Planificación Familiar, los países donantes y las fundaciones prometieron donar 2.600 millones de dólares para proporcionar planificación familiar a 120 millones de mujeres en países en desarrollo con necesidades no cubiertas para 2020. Los propios países en desarrollo también se comprometieron a aumentar el apoyo.

Sin embargo, según el informe, se necesitan otros 4.100 millones de dólares cada año para cubrir las necesidades que faltan para la planificación familiar. La inversión salvaría vidas por medio de la prevención de embarazos no deseados y abortos peligrosos.

El dinero es solo una parte de la solución, dice el informe. El informe también hace un llamamiento a gobiernos y líderes para tomar y reforzar un enfoque de la planificación familiar basado en los derechos; asegurarse de que se enfatice la planificación familiar en el programa mundial de desarrollo sostenible; garantizar la igualdad centrándose en grupos de exclusión específicos; y aumentar los fondos para invertir completamente en la planificación familiar.