Reportaje

Numerosos Jueces ilustres se reúnen para tratar el VIH, los derechos humanos y la legislación

05 de junio de 2013

Participantes en el coloquio judicial sobre el VIH, los derechos humanos y la legislación. Bangkok, Tailandia. 2-4 de junio de 2013.
Fotografía: ONUSIDA

En Asia y el Pacífico prácticamente todos los países tienen algún tipo de ley punitiva, políticas o prácticas que dificultan el acceso a los servicios de VIH a las personas que viven con el VIH y a grupos de población clave que tienen un mayor riesgo de infectarse, como los usuarios de drogas, trabajadores del sexo, hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y las personas transgénero.

Debido a estas leyes punitivas, muchas personas que necesitan servicios de prevención y tratamiento del VIH no pueden acceder a ellos por miedo al estigma, a la discriminación, a las represalias legales e incluso a la violencia.

Con el objetivo de tratar estos retos, unos 30 jueces de los más altos tribunales nacionales de 16 países de Asia y el Pacífico se reunieron para debatir el papel del poder judicial en la respuesta al VIH. También se trataron las acciones específicas que pueden llevarse a cabo para crear un entorno legal y social más propicio para las personas que viven con el VIH y para las más vulnerables en la región.

La reunión, convocada por ONUSIDA, PNUD y la Comisión internacional de juristas, formó parte de los esfuerzos que apoyan el hecho de que los jueces se conviertan en líderes de la respuesta al VIH. Los participantes destacaron el papel esencial de los jueces y los tribunales a la hora de proteger a las personas que viven con el VIH o que están afectadas por él y de alcanzar la visión de ONUSIDA de "cero discriminación".

Asimismo, después de 30 años desde que comenzara la respuesta al sida, se subrayó la necesidad de unificar los entornos legales con los últimos avances científicos en VIH y tratamiento. "Nuestra autoridad se basa en motivos y pruebas; este es nuestro mejor aliado a la hora de tratar la epidemia del VIH y lo que necesitamos para conseguir resultados justos", manifestó el honorable juez Edwin Cameron, juez del Tribunal Constitucional de Sudáfrica.

Durante la reunión, ONUSIDA publicó un nuevo Manual judicial sobre el VIH, los derechos humanos y la legislación, con información actualizada sobre los últimos avances científicos en VIH, así como derechos humanos y consideraciones legales claves para ayudar y guiar a los jueces en los casos que involucran el VIH.

Nuestra autoridad se basa en motivos y pruebas; este es nuestro mejor aliado a la hora de tratar la epidemia del VIH, y lo que necesitamos para conseguir resultados justos

Honorable juez Edwin Cameron, juez del Tribunal Constitucional de Sudáfrica

De los 38 Estados miembros de las Naciones Unidas en la región, 11 tienen algún tipo de restricción en la entrada, estancia y residencia de personas que viven con el VIH de acuerdo con su estado serológico; 37 penalizan algún aspecto del comercio sexual; 18 penalizan las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo; 11 tienen centros de detención obligatoria para los usuarios de drogas; y 15 estipulan la pena de muerte para los delitos relacionados con las drogas.

"Ha llegado la hora de revisar todas las leyes que implican a las personas marginadas de la sociedad. Necesitamos revisar la legislación desde el punto de vista de los derechos humanos que se garantizan según la Constitución y debemos asegurarnos de que permita el progreso y de que se ponga en práctica con la urgencia requerida", afirmó el honorable Ajit Prakash Shah, antiguo presidente del Tribunal Supremo de Delhi, India. En julio de 2009, Ajit Prakash Shah fue el juez que determinó que la Ley india de hace 150 años (Artículo 377 del Código Penal de India) que prohibía las relaciones homosexuales era discriminatoria y, por lo tanto, representaba una violación de los derechos fundamentales.

Jurisprudencia transformadora

La eliminación del Artículo 377 a través del Tribunal Supremo de Delhi representa uno de varios ejemplos de jurisprudencia protectora que han tenido un impacto transformador y beneficioso en la respuesta nacional al sida y en la percepción pública del VIH. Otros ejemplos son las decisiones progresivas de los tribunales en Nepal, India, Bangladesh y Taiwán que han reconocido los derechos humanos de los trabajadores del sexo, lo cual se puede comprobar en las constituciones nacionales; las decisiones en Tailandia y la India que han asegurado el acceso a medicamentos genéricos económicos; y la inclusión de Pakistán de las personas transgénero en el registro de la población bajo un estado de un tercer género, entre otros.

Los debates en el coloquio de Bangkok estuvieron apoyados por una intervención activa de representantes de grupos de personas que viven con el VIH y grupos de población clave que tienen un riesgo elevado de infectarse, junto con organismos de las Naciones Unidas y asociados, que destacaron la importancia del apoyo judicial activo a la revisión y eliminación de leyes punitivas en la región.

"Si no tratamos estos problemas, nunca pondremos fin al sida", reconoció el Sr. Shiba Phurailatpam, coordinador regional de la red de Asia y el Pacífico de personas que viven con el VIH. "Las acciones legales pueden afectar a la visión social y tener un impacto en el estigma y la discriminación, por lo que podrían salvar muchas vidas", añadió.

"La ley debe convertirse en un escudo que protege, no en una espada que castiga y aumenta la vulnerabilidad al abuso, acoso e infección por el VIH", manifestó Jan Beagle, directora ejecutiva adjunta de gestión y gobernanza de ONUSIDA. "Los jueces pueden ser de ayuda a la hora de formar actitudes sociales y de comunidad mediante actitudes hacia las personas que viven con el VIH y miembros de grupos de población clave", añadió.