El presidente interino de Sudáfrica, Kgalema Motlanthe, se reúne con el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, el 18 de enero de 2013 en Pretoria.
El Dr. Aaron Motsoaledi, ministro de Sanidad de Sudáfrica, se reúne con el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, el 18 de enero de 2013 en Pretoria.
Reportaje
El presidente interino de Sudáfrica analiza el progreso del país en la respuesta al VIH
18 de enero de 2013
18 enero 201318 enero 2013El director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, se reunió con el presidente interino de Sudáfric
El director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, se reunió con el presidente interino de Sudáfrica, Kgalema Motlanthe, y el ministro de Sanidad, el Dr. Aaron Motsoaledi el 18 de enero. La reunión empezó con un análisis del progreso realizado en la respuesta al VIH en Sudáfrica en los últimos años. El presidente interino atribuyó gran parte del éxito del país al Ministerio de Sanidad y en particular, al ministro de Sanidad. El Dr. Aaron Motsoaledi habló de los logros del país, en especial el hecho de llegar al 70% de las personas que necesitan tratamiento para el VIH con los antirretrovíricos.
El Sr. Sidibé dio la bienvenida a los avances que el país ha realizado, pero añadió que el estigma y la discriminación siguen siendo obstáculos para acceder al tratamiento y que debe romperse el silencio que rodea a las personas que viven con el VIH.
Citas
Agradezco a ONUSIDA que nos indique qué señales seguir. La respuesta al VIH se ha beneficiado de ONUSIDA. Sin la gente que me rodea, el trabajo no habría sido fácil.
En abril de 2010, el presidente de Sudáfrica presentó la campaña masiva de asesoramiento y realización de pruebas del VIH. En ese momento solo teníamos a 923 000 personas en tratamiento. Ahora, 1,9 millones de personas reciben tratamiento, en gran parte gracias a la campaña. Nuestro objetivo para 2015 es llegar a los 2,5 millones de personas y creemos que estamos en camino de llegar a ese objetivo.
Debemos romper la conspiración de silencio que rodea al VIH. El cambio no se producirá si las comunidades no creen en él.