Reportaje

El X Congreso Internacional sobre el Sida en Asia y el Pacífico se inaugura bajo el lema “Voces distintas, acción conjunta”

26 de agosto de 2011

Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA, se dirige a los participantes durante la ceremonia de apertura del ICAAP 10.
Fotografía: ONUSIDA/Kim

El X Congreso Internacional sobre el Sida en Asia y el Pacífico (ICAAP) fue inaugurado el 26 de agosto de 2011 en Busán (República de Corea) bajo el lema “Voces distintas, acción conjunta”. El evento, que se celebra cada dos años, está patrocinado por el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA) y la Sociedad del Sida en Asia y el Pacífico (ASAP).

Entre los delegados que asistieron a la ceremonia de apertura estaban el ministro de salud y bienestar surcoreano, Soo-hee Chin, el presidente de Fiji, Ratu Epeli Nailatikau, y el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé. A estos se les unieron cientos de activistas e investigadores de toda la región.

El ICAAP se celebra en un momento importante de la respuesta y la epidemia de VIH en la región. Según un informe publicado por ONUSIDA antes del congreso, la región de Asia y el Pacífico está en una encrucijada: aunque ha habido avances espectaculares, entre ellos, un acceso tres veces mayor a la terapia antirretrovírica desde 2006, este progreso está en peligro por el enfoque inadecuado sobre los grupos de población clave con mayor riesgo de infección por el VIH y una financiación insuficiente tanto de fuentes nacionales como internacionales.

“No hay tiempo para la autocomplacencia en esta región”, dijo el director ejecutivo de ONUSIDA, dirigiéndose a una audiencia de más de 2.000 personas en la ceremonia de apertura del ICAAP. “Más del 60% de las personas que viven con el VIH en Asia y el Pacífico todavía no pueden acceder al tratamiento del VIH. La ciencia ha demostrado claramente que cuando las personas toman un tratamiento antirretrovírico, tienen un 96% de protección frente al VIH. ¿A qué estamos esperando?”

Más del 60% de las personas que viven con el VIH en Asia y el Pacífico todavía no pueden acceder al tratamiento del VIH. La ciencia ha demostrado claramente que cuando las personas toman un tratamiento antirretrovírico, tienen un 96% de protección frente al VIH. ¿A qué estamos esperando?

Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA

Entre los principales objetivos del ICAAP está el capacitar y fortalecer a los líderes políticos, de la comunidad y empresariales para adoptar enfoques consultivos, colaborativos y participativos, y el ofrecer una plataforma donde voces distintas de diversas comunidades de Asia y el Pacífico puedan reorganizarse para ofrecer una acción conjunta.

“Estamos aquí juntos porque, al final, todos estamos buscando lo mismo: la salud, el sustento y la aceptación para todos, independientemente de la raza, religión, orientación sexual, identidad de género, ocupación o estado serológico respecto al VIH”, dijo Laurindo García, un ciudadano de Filipinas y coordinador de dos redes regionales en Asia y el Pacífico para hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y personas transgénero.

Se espera que los delegados participen en una amplia gama de asuntos y contextos para la epidemia del VIH en la región de Asia y el Pacífico entre los que se incluyen barreras jurídicas para el acceso universal; los avances recientes en investigación fundamental y clínica sobre el VIH; prevención en las rápidamente cambiantes comunidades de hombres que tienen relaciones sexuales con hombres; y el cambiante entorno político y financiero, así como su implicación para la respuesta al sida.

Estamos aquí juntos porque, al final, todos estamos buscando lo mismo: la salud, el sustento y la aceptación para todos, independientemente de la raza, religión, orientación sexual, identidad de género, ocupación o estado serológico respecto al VIH

Laurindo García, activista

El congreso también pretende asegurar que las comunidades afectadas y sus familias estén libres del estigma, la marginalización y la discriminación mediante acciones contra las barreras y trabajando en sociedades donde los derechos humanos a veces no se tienen en consideración.

“En Corea del Sur, nos hemos centrado en el control de la infección por el VIH como pilar de nuestra política nacional para el sida”, dijo el ministro de salud de Corea del Sur en una declaración, “pero ahora nos hemos dado cuenta de que tenemos que cambiar nuestro enfoque para tratar también el asunto de los derechos humanos para proteger a las personas que viven con el VIH”, añadió. Aunque Corea del Sur tiene una prevalencia del VIH nacional muy baja, la estigmatización y la discriminación siguen siendo una gran barrera para acceder a los servicios para el VIH en la respuesta al sida del país.

Con una duración de cinco días, la conferencia ha congregado a más de 4.000 delegados que representan a más de 55 países para debatir sobre la respuesta al sida en la región. El X Congreso Internacional sobre el Sida en Asia y el Pacífico concluye el 30 de agosto.