Reportaje

"No Time to Lose" (Sin tiempo que perder) un viaje excepcional a través de la salud mundial

14 de junio de 2012

El nuevo libro No Time to Lose de Peter Piot, el director de la Escuela de Londres de Higiene y Medicina Tropical, está cosechando elogios como narración sincera y apasionada de una vida dedicada a perseguir y burlar virus mortales.

Su autor, el Dr. Pior, antiguo director ejecutivo de ONUSIDA, fue codescubridor del virus del Ébola y un pionero en la respuesta al sida.

"En un mundo donde los verdaderos descubrimientos son poco frecuentes, las experiencias de Peter son más que destacables", dijo Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA. "Y desde este perspectiva ventajosa y especial nos transporta en un viaje personal que constituye un thriller de aventuras y un libro de iniciación a la política a partes iguales".

Desde los comienzos de su carrera, muchos trataron de convencer al Dr. Piot de que no entrara en el campo de las enfermedades infecciosas. Sus mentores fueron con frecuencia extravagantes y muy independientes - y establecieron un tono de cultivo de la curiosidad, el cuestionamiento y el inconformismo - que sería muy útil al joven médico.

Recuerda vívidamente un acontecimiento que ocurrió cuando aun no tenía 30 años y que cambió las reglas del juego. "La revelación de la primera epidemia conocida de la fiebre hemorrágica del Ébola en África fue mi iniciación a los descubrimientos científicos, incluso a las aventuras potencialmente mortales, y al mundo de lo que ahora se llama salud mundial. La epidemia del sida me forzó a enfrentarme a la extrema complejidad de salud y enfermedad y a aprender a las malas las realidades de la política a gran y a pequeña escala".

Su primer encargo internacional le llevó a Zaire (actualmente República Democrática del Congo) para investigar el brote mortal. El Dr. Piot se dio a conocer por combinar la sabiduría de la comunidad, el conocimiento local y aspectos conductuales con la ciencia biomédica para encontrar soluciones sanitarias; una combinación insólita en ese momento.

"El Ébola mostró drásticamente que, en contraste con la opinión médica imperante en las décadas de los 60 y los 70, el mundo experimentaría una serie aparentemente interminable de nuevas epidemias de enfermedades infecciosas", escribe el Dr. Piot; una premonición que le llevaría a ocuparse de uno de los mayores problemas de nuestro tiempo: la epidemia del sida.

Peter ha tenido éxito porque siempre ha antepuesto las personas a todo lo demás. Esto era cierto cuando había unos pocos recursos muy valiosos y cuando los millones de dólares para la respuesta al sida se convirtieron en miles de millones

Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA

Como primer director ejecutivo de ONUSIDA cruzó el mundo convenciendo a los líderes mundiales de que se ocuparan de la epidemia del sida mientras trabajaba para aglutinar el sistema de las Naciones Unidas a fin de ayudar a los países. El Dr. Piot ha dicho con frecuencia que aunque contaba con un sólido reconocimiento como experto en salud pública, tuvo que convertirse rápidamente en político. El libro narra cómo se jugaba a la política en el ruedo de las altas esferas del desarrollo y la salud mundiales.

Su naturaleza científica, que le permitió realizar descubrimientos como el Ébola, también hizo de él un líder tenaz y eficaz. Era intrépido y presionó a donantes y líderes nacionales para que "hicieran lo correcto".

"Peter ha tenido éxito porque siempre ha antepuesto las personas a todo lo demás. Esto era cierto cuando había unos pocos recursos muy valiosos y cuando los millones de dólares para la respuesta al sida se convirtieron en miles de millones", dijo el Sr. Sidibé. "Ha sido mentor y amigo y gracias a sus éxitos, todos hemos aprendido y nos hemos beneficiado".

Sus logros no se alcanzaron sin arrepentimientos. El Dr. Piot escribe en el epílogo, sobre su último día en ONUSIDA, que todavía "le obsesionaba la pregunta de qué podría haber hecho antes y más rápido".

Durante toda su carrera, el Dr. Piot ha mantenido intactos su sentido del humor y su aprecio por la vida. Ya sea pensando en los mojitos con Fidel Castro en Cuba o presentando sus respetos a Diago - un bar de sake en Tokio- su gusto por la buena comida y el buen vino es evidente y seguramente darán lugar a un segundo libro.

No Time to Lose se presentará en la ciudad de Nueva York, en el Council on Foreign Relations el lunes 18 de junio de 2012.