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Apoyando los esfuerzos encaminados a poner fin al matrimonio infantil en América Latina y el Caribe
24 de marzo de 2017
24 marzo 201724 marzo 2017El matrimonio infantil es frecuente en gran parte de América Latina y el Caribe, conformando alre
El matrimonio infantil es frecuente en gran parte de América Latina y el Caribe, conformando alrededor del 23% de los matrimonios en la zona, a pesar de las leyes que lo prohíben.
El impacto que tienen el matrimonio infantil y las uniones tempranas (en las que uno de los miembros es menor de 18 años) en las niñas y en sus sociedades puede ser devastador. Las pruebas indican que existe una estrecha relación entre el matrimonio infantil y las uniones tempranas y el embarazo precoz, la mortalidad materna e infantil, unos niveles educativos más bajos para las niñas y una posición inferior en el índice de desarrollo humano. Además, el matrimonio infantil y las uniones tempranas hacen que las niñas sean más propensas a contraer enfermedades de transmisión sexual, lo que incluye el VIH.
En un acto de alto nivel organizado conjuntamente por las Misiones Permanentes de Panamá y de Guatemala ante las Naciones Unidas en colaboración con ONU Mujeres, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y ONUSIDA, se presentaron las lecciones aprendidas y las opciones programáticas y normativas para hacer frente al matrimonio infantil en América Latina y el Caribe.
En dicho acontecimiento, que se celebró el 17 de marzo en la sede central de las Naciones Unidas en Nueva York (Estados Unidos de América), durante la sexagésima primera sesión de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, los participantes reconocieron que el matrimonio infantil y las uniones tempranas constituyen una violación de los derechos humanos y suponen una grave amenaza para las vidas, la salud y el futuro desarrollo de las niñas.
El acto se centró en la importancia de apoyar reformas legislativas para elevar la edad legal de matrimonio a los 18 años y promover programas que empoderen a las niñas y mujeres jóvenes.
Asimismo, se identificaron estrategias y enfoques exitosos para la reducción de las tasas de matrimonio infantil. Por ejemplo, Panamá —donde alrededor de un 26% de las niñas se casa antes de los 18 años y aproximadamente un 7% antes de los 15— ha reformado su legislación nacional en lo que respecta a la edad legal de matrimonio. Ahora, la edad mínima legal de matrimonio en el país son los 18 años, al igual que la edad de consentimiento. Antes, con el permiso de los padres, las niñas de apenas 14 años y los niños de 16 se podían casar. En Guatemala, gracias a las acciones de sensibilización impulsadas por ONU Mujeres, la sociedad civil y la cooperación internacional, se han aprobado reformas en los códigos civil y penal con el objetivo de elevar la edad mínima de matrimonio a los 18 años.
Desde el año 2015, ONUSIDA ha trabajado como asociado con ONU Mujeres, UNICEF, UNFPA y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en una iniciativa conjunta para poner fin al matrimonio infantil y las uniones tempranas. Esta iniciativa apoya las acciones de los gobiernos de manera que se asegure que, a lo largo de toda su vida, las niñas y las mujeres ven reconocidas y garantizadas sus múltiples necesidades.
ONUSIDA está trabajando con diversos países para eliminar las desigualdades de género y toda forma de violencia y discriminación contra las mujeres y niñas para el año 2020, como se especifica en la Declaración Política de las Naciones Unidas de 2016 sobre el VIH y el sida.
Citas
“El matrimonio infantil y las uniones tempranas constituyen una violación de los derechos humanos. Punto.”
“Poner fin al matrimonio infantil es un imperativo moral y legal, y requiere que se tomen medidas a muchos niveles. Los gobiernos, la sociedad civil y otros asociados deben trabajar conjuntamente para asegurar que las niñas cuentan con acceso a la educación, información y servicios relacionados con la salud, y empoderamiento."
“Reconozco los esfuerzos realizados por países como Panamá, Guatemala, Ecuador y México para poner fin al matrimonio infantil. Son un ejemplo para garantizar los derechos humanos de las niñas.”