Reportaje

Pruebas en saliva para la detección del VIH para los hombres gais y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres de la República Democrática Popular Lao

17 de enero de 2019

En la República Democrática Popular Lao, tan solo un tercio de los gais y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres conoce su estado serológico, y esto se debe, en buena medida, a que el estigma y la discriminación siguen obstaculizando el acceso a las pruebas del VIH en los hospitales públicos y en las clínicas. Los complicados protocolos, un tratamiento irregular prestado por personal sanitario que, en ocasiones, está cargado de prejuicios y la falta de confidencialidad en relación a los resultados son aspectos que afectan significativamente a las pruebas del VIH.

“A muchos de nuestros amigos les asusta hacerse la prueba del  VIH porque encuentran intimidante, e incluso hostil, el procedimiento”, afirma Phoulikhan Siphabouddy, un cooperante de la organización no gubernamental LaoPHA de Laos.

Para resolver este problema, ONUSIDA ha prestado su apoyo al Gobierno y a LaoPHA para la realización de pruebas piloto en saliva en tres provincias.

La mayoría de las personas dan por sentado que para realizar las pruebas es necesaria una muestra de sangre. Sin embargo, en las pruebas en saliva se detectan anticuerpos contra el VIH, no el virus en sí. Dicha prueba consiste en frotar suavemente las encías superiores e inferiores de la persona con un bastoncillo que, a continuación, se introduce en un tubo de ensayo que contiene el reactivo. El resultado está listo en 20 minutos.

Miembros de la propia comunidad, los denominados “educadores inter pares”, forman a los voluntarios sobre cómo se realizan las pruebas en saliva. Estas pruebas son rápidas, sencillas y pueden realizarse en cualquier lugar.

Según el Ministerio de Salud, alrededor del 82% de las personas a las que se accedió aceptaron realizarse la prueba del VIH mediante el análisis de la saliva, frente al 17% de quienes fueron remitidos a las clínicas.

“Este nuevo enfoque supera con creces, en más del 200%, los objetivos de Laos en cuanto a las pruebas del VIH”, exponía Bounpheng Philavong, director del Centro para el VIH/Sida e ITS de Laos.

Tanto el Sr. Philavong como LaoPHA están convencidos de que la prestación de servicios por la propia comunidad facilita un entorno propicio y sin discriminación que posibilita el acceso de los grupos de población clave a los servicios para el VIH. Los enlaces a la asistencia y el apoyo para las personas que viven con el VIH también han mejorado y las personas a quienes se les diagnostica como seropositivos cuentan con la ayuda de los voluntarios de la comunidad, que les remiten a clínicas de confianza.