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El director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sibidé (izquierda); el presidente de Tanzanía, Jakaya Mrisho Kikwete (centro); y la vicesecretaria general de la ONU, Asha-Rose Migiro, en la sede del Gobierno en Dar Es Salaam el 4 de abril de 2011.

En una misión conjunta con la República Unida de Tanzanía, la vicesecretaria general de la ONU, Asha-Rose Migiro, y el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sibidé, se reunieron el lunes con altos funcionarios del Gobierno, entre los que se encontraban el presidente, el primer ministro, el ministro de Salud y Bienestar Social y el jefe de la Comisión de Tanzanía sobre el sida (TACAIDS, por su siglas en inglés).

“Gracias a su sólido liderazgo y voluntad política, Tanzanía ha cosechado un gran éxito en su respuesta al VIH”, señaló la Dra. Asha-Rose Migiro en una reunión con el presidente Jakaya Mrisho Kikwete en la sede del Gobierno en Dar Es Salaam.

Se calcula que el 52% de la población de Tanzanía que necesita un tratamiento antirretrovírico está siendo tratada, un gran aumento comparado con la cobertura prácticamente inexistente en 2004. Asimismo, la cobertura en los servicios de prevención de la transmisión maternoinfantil del VIH aumentó de un 10% en 2004 a un 70% en 2010.

“Me gustaría que su legado fuera alcanzar la meta de cero infecciones nuevas por el VIH entre la población infantil para el año 2015”, manifestó el Sr. Sibidé en su reunión con el presidente Kikwete. Además, añadió: “Me gustaría que Tanzanía fuera uno de los primeros países en erradicar la transmisión maternoinfantil del VIH”.

El presidente Kikwete recalcó que el VIH es un asunto especialmente prioritario en su país. Sin embargo, también expresó su preocupación acerca de la sostenibilidad de la respuesta al sida, en particular en el actual contexto de la crisis económica mundial. Para hacer frente a estas preocupaciones, el Gobierno ha creado recientemente un fondo fiduciario con el objetivo de reducir el déficit de financiación nacional para el sida.

El Sr. Sibidé se hizo eco de las preocupaciones del presidente sobre la falta de financiación previsible y a largo plazo para las respuestas al VIH. Afirmó que cerca del 96% de las personas que reciben tratamiento contra el VIH en el continente africano reciben una financiación a través de fuentes externas. Así pues, instó a las autoridades de Tanzanía a encabezar un debate sobre la responsabilidad nacional de las respuestas al VIH en la reunión de alto nivel sobre el sida de la Asamblea General de este año.