Reportaje

Un innovador programa de cupones electrónicos de PMA en Zimbabwe ayuda a muchas personas que viven con el VIH

27 de abril de 2012

En Harare y Bulawayo, las personas que viven con el VIH reciben cupones del PMA que les permiten adquirir productos para mantener a una familia durante un mes en una de entre varias tiendas locales.
Fotografía: PMA

Loveness y sus tres hijos, Robert, Susan y Julia, comparten una habitación en el fondo de un garaje en Bulawayo, la segunda ciudad más grande del país. Todos ellos viven con el VIH y Loveness lucha para llegar a fin de mes y llevar suficiente comida para su familia.  En el pasado, ella misma pasaba hambre para asegurarse de que sus hijos pudiesen comer, aunque muchas veces solo fueran tres cucharadas de gachas de avena para cada uno.

Sin embargo, Loveness y su familia miran hacia un futuro mejor con la ayuda del Programa Mundial de Alimentos (PMA). El organismo de la ONU está utilizando un innovador sistema de cupones electrónicos en Harare y Bulawayo para dar apoyo nutricional a los enfermos crónicos y las familias sin una fuente segura de alimento, grupos en los que encontramos muchas personas que viven con el VIH. 

Se calcula que en Zimbabwe viven con el virus un 14,3% de adultos, alrededor de 1,2 millones de personas, y en torno a 150 000 niños.

Un desafío a la malnutrición

Con este programa desarrollado por el PMA, a través de la colaboración con las ONG y el Ministerio de Salud y Bienestar Infantil, se deriva a los pacientes malnutridos que acuden a las clínicas locales u hospitales a los centros más cercanos de distribución de alimentos y cupones del PMA, donde les dan SuperCereal. Se trata de una mezcla de maíz, proteína de soja y micronutrientes enriquecida y altamente nutritiva.  (La malnutrición se calcula según el índice de masa corporal en los adultos y a través de la medida de la circunferencia del brazo en los niños).

También les facilitan un cupón electrónico para comprar comida predeterminada, como aceite y judías, en los supermercados seleccionados. El valor del cupón depende de cuántos miembros tenga la familia y, cuando se presenta, el vendedor accede a una base de datos electrónica para comprobar la ración asignada para un mes.

Los cupones en efectivo son una alternativa a la asistencia alimentaria pagada en especie y el PMA los utiliza para tratar el hambre allí donde los alimentos están disponibles en el mercado, pero la mayoría de la gente no puede permitírselos.

Un enfoque integral

Para aquellos que, como Loveness y su familia, viven con el VIH, el apoyo nutricional del PMA forma parte de un enfoque integral Una parte importante del programa es animar a los beneficiarios a someterse a una revisión médica una vez al mes en una clínica u hospital cercanos. El Ministerio de Salud y Bienestar Infantil trabaja estrechamente con el PMA y aporta tratamiento antirretrovírico gratuito (ART), cuando es necesario. Todos los hijos de Loveness están recibiendo esta medicación. 

La asistencia alimentaria me ayuda porque los niños comen lo suficiente y el poco dinero que hasta ahora he gastado en comida, lo puedo invertir en las tasas escolares

Loveness, beneficiaria del cupón electrónico

La asistencia alimentaria no solo aumenta la efectividad del tratamiento, sino que también ayuda a asegurar una mayor adhesión a las pautas del tratamiento. Una buena nutrición es fundamental para proteger a las personas que viven con el VIH y, según el PMA, el virus, la malnutrición y la inseguridad alimentaria están inextricablemente vinculados.  Cuando las personas que viven con el VIH están malnutridas, el riesgo de muerte aumenta considerablemente. A pesar de que las personas que viven con el VIH necesitan más calorías y nutrientes que las personas que no viven con el virus, suelen tener menos apetito y menor capacidad para absorber nutrientes.

La ampliación del programa

El plan de cupones ayuda a unos 8 000 clientes y sus familias. El Director nacional del PMA, Felix Bamezon, está satisfecho del éxito del programa en Harare y Bulawayo y quiere que otras zonas también se beneficien: "El PMA planea llevar el cupón electrónico a otras ciudades en las que sea posible".

Según Loveness, ha marcado una gran diferencia: "la asistencia alimentaria me ayuda porque los niños comen lo suficiente y el poco dinero que hasta ahora he gastado en comida, lo puedo invertir en las tasas escolares". 

El PMA es la mayor agencia humanitaria que lucha contra el hambre en el mundo. Da alimento a más de 90 millones de personas en más de 70 países cada año. En 2010, el PMA ayudó a más de 2,5 millones de beneficiarios en casi 50 países a través de sus programas de VIH y tuberculosis, Esto incluye los alimentos y la ayuda nutricional para unas 500 000 personas que viven con el VIH como parte del tratamiento antirretrovírico y de la tuberculosis.