Press Statement

En el Día de los Derechos Humanos, ONUSIDA defiende la protección y promoción de los derechos humanos para todos

Las comunidades más afectadas por el VIH deben participar activamente en la respuesta al VIH si queremos acabar con el estigma, la discriminación y la denegación de los derechos humanos. Estos problemas siguen poniendo a muchas personas en riesgo de contraer la infección por el VIH e impiden que accedan a servicios de tratamiento y prevención del VIH.

GINEBRA, 10 de diciembre de 2016.—No podremos poner fin a la epidemia de sida sin medidas firmes que promuevan los derechos humanos de las personas que han quedado más olvidadas. La discriminación y el estigma basados en el estado de salud, el género, la orientación sexual, la drogodependencia o la condición de discapacidad, migrante o refugiado, impiden que estas personas tengan acceso a servicios de prevención, tratamiento, atención y apoyo relacionados con el VIH que pueden salvar vidas. Las desigualdades y la injusticia amenazan el desarrollo sostenible y perpetúan la exclusión social en todo el mundo.

«La respuesta al VIH ha demostrado la importancia y viabilidad de evitar las violaciones de los derechos humanos que están alimentando la epidemia», explicó Michel Sidibé, director ejecutivo de ONUSIDA. «La voz y el liderazgo de las personas que viven con el VIH y los grupos de población clave siguen siendo esenciales para poner fin a la epidemia de sida. ONUSIDA defiende los derechos y la participación activa de las comunidades afectadas».

En el Día de los Derechos Humanos, ONUSIDA pide que defendamos los derechos de las personas más discriminadas y marginadas para poner fin al estigma, la discriminación y las violaciones de los derechos humanos.