Winnie Byanyima, Directora Ejecutiva de ONUSIDA, dijo:

«La vida de su majestad la reina Isabel II fue un servicio público continuo.

La reina Isabel II fue una gran amiga de las Naciones Unidas y siempre se refirió muy emotivamente a su trabajo y sus valores, incluso en su famoso discurso dirigido a la Asamblea General de las Naciones Unidas en el año 1957.

La reina Isabel II estaba entregada a poner fin al sida y a acabar con el estigma del que son víctimas las personas que viven con el VIH. Así, durante el encuentro de los jefes de gobierno del Commonwealth celebrado en Uganda en 2007, ella quiso visitar el hospital Mildmay, donde tuvo la oportunidad de reunirse con las personas que viven con el VIH y sus familias, y aquel gesto contribuyó a plantarle cara al estigma y afirmar la dignidad y los derechos de todas las personas que viven con el VIH. También ayudó a fortalecer la respuesta al VIH, centrada en la inclusión y los derechos de las comunidades afectadas por el VIH, pilares fundamentales para el Commonwealth.

Ojalá su grandísimo ejemplo nos sirva a todos de inspiración. Desde estas líneas quiero expresar mis profundas condolencias a su familia, al Gobierno y a todas las personas del Reino Unido y de los países del Commonwealth».