Reportaje

Implicar a las ciudades en la respuesta al VIH

10 de agosto de 2010

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El director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, realiza su discurso inaugural en torno al tema ·El VIH en las ciudades del siglo XXi" en el Foro internacional en materia de ciudades y salud, 9 de agosto de 2010, Shanghai, China. Fotografía: ONUSIDA

Alrededor de la mitad de la población mundial habita en las ciudades. Para el año 2050, siete de cada diez ciudadanos vivirán en una “mega ciudad” que contará con más de diez millones de habitantes. Esta semana, durante la visita oficial a Shanghai, una de las metrópolis más grandes del planeta, el director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, subrayó la importancia del papel que desempeñan las grandes ciudades en la respuesta al sida.

“A pesar de que ha quedado patente la importancia que tienen las ciudades en la respuesta al VIH, éstas no han recibido el apoyo y la movilización necesarios para actuar", expuso Sidibé mientras se dirigía a un público de más de cien mil líderes y profesionales del sector sanitario de toda China. “Creo que es el momento de cambiar la situación y de que las ciudades encabecen el camino para hacer historia en lo que al VIH se refiere".

El rápido crecimiento de las ciudades ha desarrollado ciertas condiciones en las que el virus puede propagarse con facilidad. A nivel global, se estima que una cifra tan elevada como es el 50% de las personas seropositivas vive en ciudades. En algunas zonas urbanas, la epidemia del VIH está tan generalizada que puede compararse con las epidemias nacionales de países enteros.

Sidibé, consciente de que los gobiernos locales disponen del poder administrativo y de los sistemas adecuados para facilitar servicios sociales, instó a dichas autoridades a movilizar todos los recursos disponibles a fin de garantizar el acceso universal a la prevención, tratamiento, atención y apoyo relacionados con el VIH. Sin embargo, según sus declaraciones, apenas unas pocas ciudades han demostrado un liderazgo emprendedor con celeridad.

 

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El director ejecutivo de ONUSIDA, Michel Sidibé, realiza su discurso inaugural en torno al tema ·El VIH en las ciudades del siglo XXi" en el Foro internacional en materia de ciudades y salud, 9 de agosto de 2010, Shanghai, China. Fotografía: ONUSIDA

Los esfuerzos que lleva a cabo la ciudad de Bangkok para reducir la prevalencia del virus entre los trabajadores del sexo constituyen un gran éxito. En colaboración con personal de atención sanitaria, la policía, propietarios de la industria de entretenimiento, organizaciones no gubernamentales y trabajadores del sexo, a principios de los años 90 las autoridades de Bangkok pusieron en marcha en toda la ciudad una campaña para promover la utilización sistemática del preservativo. A lo largo de 20 años, la prevalencia del VIH entre los trabajadores del sexo que trabajan en los prostíbulos ha disminuido de forma significativa.

En su visita a Shanghai, Sidibé elogió a los líderes chinos por el progreso que ha experimentado el país a la hora de mejorar el tratamiento de mantenimiento con metadona y los programas de intercambio de agujas en las grandes ciudades, hecho que ha sido fundamental para frenar la epidemia del virus entre los usuarios de drogas inyectables. “Animo a China a que continúe difundiendo estos programas, sobre todo a nivel de la comunidad, y a que reconsidere si los centros de detención por consumo de estupefacientes son realmente eficaces dentro de la estrategia nacional destinada a prevenir la transmisión del VIH", declaró.

Otras ciudades que hacen frente a las crecientes epidemias del VIH entre los consumidores de drogas inyectables, como Sydney, Toronto y Ginebra, han aplicado programas de reducción de daños rentables, entre los que se incluyen el intercambio de agujas y la terapia de sustitución de opiáceos, para detener la oleada de nuevas infecciones por el virus.

Sidibé desafió a las ciudades chinas a situarse al frente de las respuestas al sida localizadas que se encarguen especialmente de las necesidades de aquellas poblaciones más expuestas al riesgo de infección por el VIH, como los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, los trabajadores migrantes, los trabajadores del sexo y los consumidores de drogas inyectables. Asimismo, instó a Shanghai a aprovechar el impulso de la Expo 2010 para unir y movilizar a las grandes ciudades del mundo a fin de erradicar el VIH para el año 2015.