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Los retos de las respuestas de la fe a la epidemia de sida
20 de julio de 2016
20 julio 201620 julio 2016Una respuesta potente de la fe es fundamental para conseguir los objetivos de acción acelerada en
Una respuesta potente de la fe es fundamental para conseguir los objetivos de acción acelerada en 2020 y de poner fin al sida en 2030. Sin embargo, la movilización eficaz de esa respuesta se enfrenta a muchos retos únicos. Esos retos fueron el tema de una sesión en la 21ª Conferencia Internacional sobre el Sida celebrada en Durban, Sudáfrica.
Recabar datos acerca de las actividades religiosas con frecuencia es muy complicado, especialmente en el contexto de la epidemia de sida, donde a menudo existe la percepción de conflicto entre los valores religiosos y las prioridades de salud. No obstante, se han hecho avances, como se refleja en una edición especial de The Lancet sobre la fe y la atención sanitaria.
Se realizaron presentaciones sobre dos de los artículos de la edición especial de esta revista especializada: uno sobre los datos y otro sobre las controversias. Se subrayó que las respuestas comunitarias religiosas no siempre coinciden con la estrategia internacional y que la fe es solamente uno de los muchos factores que contribuyen a problemas como el matrimonio infantil, la mutilación genital femenina, la violencia contra las mujeres, la provisión de servicios de salud sexual y reproductiva y el estigma relacionado con el VIH. Ambos ponentes estaban de acuerdo en la importancia de considerar las iniciativas basadas en la fe como una parte integral del sistema de salud.
Asimismo se abordaron los problemas desde una perspectiva comunitaria. Se describió el proceso de aumento de la sensibilización del VIH utilizando textos religiosos y principios musulmanes para explorar los problemas, así como el papel fundamental que juegan los líderes religiosos en la reducción de los efectos del estigma.
El arzobispo anglicano de Ciudad del Cabo describió la respuesta de su iglesia a los casos de «violación correctiva», que le han llevado a poner en marcha iniciativas contra la violencia de género y el tráfico de seres humanos. Observó que los datos demuestran que la prevalencia de VIH entre los supervivientes de violencia sexual es mucho más elevada que entre la población general.
A lo largo de la historia de la epidemia de sida, la importancia de la respuesta de la fe se ha hecho cada vez más evidente. Luiz Loures, director ejecutivo adjunto de ONUSIDA, describió una iniciativa conjunta puesta en marcha recientemente por ONUSIDA y el Plan de emergencia del presidente de los Estados Unidos para el alivio del sida dirigida a reforzar la respuesta de la fe al VIH, con la esperanza de que las iniciativas basadas en la fe contribuyan de forma muy importante a las respuesta comunitarias fundamentales para erradicar la epidemia de sida.
Citas
«En la actualidad tenemos una gran urgencia; contamos con una ventana muy estrecha para controlar la epidemia de sida y ver el final de esta enfermedad. Al menos el 30 % de la prestación de servicios en relación con el VIH lo deben proporcionar las comunidades, y ahí es donde la comunidad religiosa tiene un papel fundamental en la prestación de esos servicios y la eliminación del estigma y la discriminación».
«Existe un agujero negro de pruebas en torno al papel de las organizaciones religiosas en la asistencia sanitaria en general, y en la respuesta al sida en particular. Se necesitan más investigaciones para rellenar las lagunas críticas».
«Las comunidades religiosas son el punto de inflexión para la resolución con éxito de muchos retos de desarrollo, incluido el VIH».
«En Indonesia, responder al VIH se considera como una responsabilidad colectiva. Debemos hacer un gran esfuerzo para comprender y responder al VIH a través de la lente de los textos religiosos».
«Todos estamos creados a imagen y semejanza de Dios. Debemos desarrollar teologías que den la vida».
«El VIH nos ha cambiado profundamente como Iglesia. La dignidad humana, especialmente la dignidad de la mujer, es innegociable».