Reportaje
Cambiar vidas para lograr el objetivo cero
26 de octubre de 2016
26 octubre 201626 octubre 2016A Khonjiswa Mdyeshana nunca se le pasó por la cabeza que pudiera ser seropositiva.
A Khonjiswa Mdyeshana nunca se le pasó por la cabeza que pudiera ser seropositiva. Por eso, cuando en 2006 la prueba del VIH dio positivo durante el embarazo de su primer hijo, no podía creérselo. Insistió en realizarse la prueba tres veces. Para su asombro, las tres el resultado fue positivo. "En mi mente, era el fin del mundo para mí y para mi hijo", dice.
Lo que la Sra. Mdyeshana no sabía es que junto a los médicos y los enfermeros de la clínica trabajaban las Mentor Mothers, mujeres seropositivas, contratadas y formadas por la organización no gubernamental con sede en África, mothers2mothers (m2m). Las Mentor Mothers ofrecían a mujeres como ella educación y ayuda para iniciar y cumplir el tratamiento contra el VIH.
"Las mujeres de m2m me hicieron sentir acogida y sin miedos. Me contaron cómo eran sus vidas con el VIH. Me enseñaron cómo evitar el contagio de mi bebé y a vivir de manera positiva. Tengo que ser sincera, no estaba segura al 100 % de todo, pero en cierta manera, tenía una nueva esperanza y me decía que no era el fin", afirma la Sra. Mdyeshana.
Desde la fundación de m2m en 2001, esta organización se ha convertido en líder mundial en el trabajo de reducción de las infecciones pediátricas por el VIH a cero y mejorar la salud y el bienestar de las madres, las familias y las comunidades.
El modelo de Mentor Mothers de m2m ha demostrado que reduce el número de niños que se infectan con el VIH y mejora los resultados en materia de salud de las madres y los bebés, al tiempo que ahorra dinero al evitar los costes del tratamiento del VIH. Una evaluación anual de los programas m2m publicada recientemente halló que en 2015 la organización logró unos resultados significativos:
- m2m eliminó prácticamente la transmisión maternoinfantil del VIH entre sus clientes por segundo año consecutivo, con una tasa de transmisión maternoinfantil del VIH del 2,1 % tras 24 meses.
- En Sudáfrica, la tasa de transmisión de m2m fue incluso inferior: el 1,1 % al cabo de 18 meses.
- Las madres que se reunían dos o más veces con una Mentor Mother tenían siete veces más probabilidades de que se realizara la prueba del VIH a sus bebés a las seis semanas en comparación con aquellas madres que solo se reunían una vez con la mentora.
"Es una alegría entrar en un centro y oír a una enfermera o al director de la clínica decir: "Sepa usted que hace tres años que no nace un bebé con el VIH en esta clínica gracias a mothers2mothers", dice el presidente y director ejecutivo de m2m, Frank Beadle de Palomo.
No obstante, los niños aun se infectan durante el periodo de lactancia. Y se ha producido un aumento en el número de infecciones y muertes entre los adolescentes, en especial entre las adolescentes y las jóvenes.
Como respuesta a esta necesidad, m2m se involucra con las madres y sus familias durante un periodo más largo con un enfoque centrado en la familia. m2m mira más allá de la supervivencia y se centra en dar a los niños la oportunidad de prosperar gracias a sus programas de desarrollo de la primera infancia y detección de casos pediátricos y apoyo. Y la nueva iniciativa DREAMS en Sudáfrica proporciona a los adolescentes las habilidades y los conocimientos necesarios para protegerse a ellos mismas y a la siguiente generación del VIH.
En lo que respecta a la Sra. Mdyeshana ha recorrido un largo camino desde 2006. Ahora trabaja como Mentor Mother, ayudando a otras mujeres a darse cuenta de que vivir con el VIH no es el fin de su mundo. Es una orgullosa madre de dos niños sin VIH, llenos de vida, felicidad y grandes sueños.
Su hijo mayor, Luthando, de nueve años, cuenta a su madre que está estudiando mucho para poder tener un buen trabajo cuando crezca y comprarles una casa más grande. ¿Qué trabajo? El niño dice que será médico, porque ve "mucha gente enferma alrededor" y quiere ayudarles. Mientras trabaja para conseguir su sueño, practica sus habilidades médicas en casa, recordando a su madre, a la que describe como "fuerte y hermosa", que tome el medicamento contra el VIH todos los días.