Reportaje
Comprobación del progreso de los 10 compromisos mediante la Vigilancia Global de ONUSIDA
07 de mayo de 2018
07 mayo 201807 mayo 2018En la Reunión de Alto Nivel sobre Acabar con el SIDA que se celebró en las Naciones Unidas en 201
En la Reunión de Alto Nivel sobre Acabar con el SIDA que se celebró en las Naciones Unidas en 2016, los países se comprometieron a alcanzar 10 compromisos de vía rápida para 2020 —un objetivo que busca acelerar el progreso para conseguir que para el 2030 se haya acabado con la epidemia del SIDA, como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. La Asamblea General de las Naciones Unidas, con la finalidad de contribuir a que se consiga llegar a los plazos, ha solicitado un informe anual del progreso que ha tenido lugar para cumplir estos 10 compromisos.
ONUSIDA proporciona ayuda a los países para recabar información sobre sus respuestas nacionales al VIH mediante el Marco de Vigilancia Global del SIDA (GAM), una colección anual compuesta por 72 indicadores de la respuesta al VIH en un país. Estos datos forman parte del conjunto que se emplean para informar a la Asamblea General.
A diferencia de las estimaciones epidemológicas del VIH que producen los países para aportar datos sobre el estado de la epidemia en un país, es decir, datos para poder hacer las estimaciones sobre las personas que viven con el VIH, las muertes relacionadas con el SIDA, etc. — el GAM colecciona información de programas de VIH, incluido el número de personas que viven con el VIH que conocen su estado serológico, personas que disponen de un tratamiento contra el VIH, que sufren del estigma o de la discriminación. Una lista completa de los indicadores se da en las directrices del GAM.
Una característica notable de la recogida de datos para el GAM y las estimaciones epidemológicas del VIH es la rapidez con la que se adquiere la información, para presentarla y difundirla. En diciembre, ONUSIDA se encarga de distribuir las directrices del GAM a países. A finales de marzo, los países presentan sus datos en línea. En colaboración con la Organización Mundial de la Salud, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades, los datos se validan y finalizan. Las estimaciones epidemiológicas del VIH se producen a lo largo de la misma línea de tiempo, con el software a disposición de los países a principios de enero y las estimaciones finales que presentan los países a finales de marzo. El análisis de los resultados globales de ambas colecciones de datos se publican en el informe de ONUSIDA a mitad de año, en el sitio web AIDSinfo y, por último, se informa a la Asamblea General de las Naciones Unidas.
A pesar de la corta línea de tiempo que se dispone para los informes, en 2017, un total de 174 países presentó datos sobre sus indicadores de respuesta programática a través del GAM. La proporción de países que han enviado sus datos a través de la página web del GAM ha mejorado progresivamente: de 53 % de los países en 2004 a 96 % en 2012, aunque el porcentaje cayó en 2017 a un 90 %, cuando el ciclo de informes cambió de bienal a anual. Antes de 2015, GAM se conocía como el Informe Mundial de Avances en la Lucha contra el SIDA (GARPR) y se empleaba para informar sobre los objetivos mundiales para la respuesta al SIDA en los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Un componente clave para asegurar que los datos relacionados con el VIH sean tan exactos como sea posible es recoger la información apropiada para poder comenzar. Por lo tanto, cada año que se realiza una revisión de cada indicador y los ajustes que se llevan a cabo para establecer los indicadores se realizan con el fin de garantizar que la información en las respuestas nacionales al SIDA sea exacta y pertinente. En 2018, dos nuevos indicadores, en la prueba del VIH entre mujeres embarazadas y en las experiencias de discriminación relacionados con el VIH en entornos de atención, se añadieron, mientras que otros se modificaron.
Los indicadores se seleccionan cuidadosamente para garantizar la mejor recolección de datos con la menor carga de sistemas de monitoreo de los países y, además, se alinean con los indicadores para los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Los indicadores también son granulares y a los países se les pide que proporcionen datos desglosados a nivel municipal para algunos indicadores.
Pensando sobre el futuro, la recogida de datos liderada por las comunidades, como a través de aplicaciones móviles o de observatorios de la comunidad, se observan como herramientas de recogida de datos complementarias para diferentes perspectivas de las respuestas al SIDA de los países.
El GAM es otra forma en la que ONUSIDA ayuda a los países monitorear y responder a sus epidemias de VIH y trabajar para acabar con el SIDA en el 2030.