PER

Hacer frente a la violencia contra las trabajadoras sexuales en Perú

27 de julio de 2023

Ángela Villón Bustamante es trabajadora sexual y activista por los derechos humanos de las compañeras de su comunidad en Perú desde hace casi 25 años. Ha vivido en carne propia la violencia de la que son víctimas las mujeres trabajadoras sexuales, y fue después de una golpiza que le dio un policía en 1996 que comenzó su activismo.  

No quiero que ninguna compañera más más termine casi muerta como quedé yo hace 25 años,” dice Ángela. “Miluska Vida y Dignidad es la organización que formé en 1996 para encontrar justicia hacia las trabajadoras sexuales violentadas por las fuerzas públicas, en honor a mi compañera Miluska que murió tras una golpiza. Es la primera organización de trabajadoras sexuales de Perú.” 

En los mismos años, Alejandra Fang, mujer trans, era encarcelada por ejercer el trabajo sexual y la policía le pedía tener sexo para dejarla en libertad. “Me vi forzada a ejercer el trabajo sexual porque como mujer trans no tenía otra alternativa. A raíz de esa situación traumática decidí ser activista”, dice Alejandra. 

Como Ángela, Alejandra también convirtió las experiencias de las que fue víctima en oportunidades para que nadie tuviera que pasar por las mismas situaciones. Así, pasó a formar parte de la Casa Trans Zuleymi y ahora lidera Trans Organización Feminista.    

Según la Defensoría del Pueblo de Perú, el 95,8% de las mujeres trans ha sido víctima de violencia, el 62,2% ejerce el trabajo sexual por falta de oportunidades laborales y sólo el 5,1% ha completado la educación secundaria.    

Más de 10 trabajadoras sexuales cis y transgénero han sido asesinadas desde principios de este año en Perú - cuatro trabajadoras sexuales transgénero en una sola semana, hasta el 1 de febrero. "Esta situación se extendió a otras provincias de Perú, y las trabajadoras sexuales tuvieron que esconderse durante semanas para proteger sus vidas", afirma Ángela. "No hemos podido trabajar ni atender nuestras necesidades básicas personales y familiares".   

La criminalización contra las trabajadoras sexuales les impide buscar justicia cuando sufren acoso, daños físicos u otro tipo de discriminación. "A menudo no denunciamos los abusos para evitar más malos tratos y por el estigma que conlleva nuestra ocupación", explica la activista.   

"Ya sean personas viviendo con VIH, migrantes, afrodescendientes o indígenas, todas estas intersecciones generan un estigma y una discriminación exponenciales y las colocan en una situación de extrema vulnerabilidad", afirma la Directora de ONUSIDA para los países andinos (Perú, Ecuador, Bolivia y Colombia), Andrea Boccardi. "Las pone en una situación tan precaria que dificulta su acceso a servicios de salud, seguridad alimentaria, empleo, educación y justicia. Aunque el trabajo sexual autónomo en Perú es legal, siempre han sido criminalizadas".   

Dada la situación de violencia contra las trabajadoras sexuales en Perú, las organizaciones lideradas por Ángela y Alejandra se encuentran entre las que están implementando un plan con el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables de Perú para hacer frente a la violencia contra las trabajadoras sexuales en el país.   

Más de 100 policías ya han recibido formación mediante cursos diseñados y facilitados por trabajadoras sexuales cis y transgénero. La formación proporciona conocimientos sobre derechos humanos, estigma y discriminación, y sobre la importancia de que en su rol como garantes de la justicia contribuyan al trato digno y basado en los derechos humanos de todas las personas en Perú.  

Además de coordinar y facilitar un grupo de trabajo para luchar contra la violencia y promover los derechos fundamentales de las trabajadoras sexuales con varias organizaciones y redes locales y regionales, ONUSIDA también se ha asociado con la Defensoría del Pueblo del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de Perú y con representantes de la comunidad trabajadoras sexuales para desarrollar un protocolo para la prestación de servicios de asistencia jurídica y defensa de estas mujeres víctimas de abuso y violencia.   

"Después de tantos años, siento que ahora se escucha nuestra voz", afirma Ángela. 

 

Related resources

Más informacion sobre la criminalización del VIH:

decriminalise.unaids.org 

Las comunidades, en el centro de una respuesta urgente orquestada a la viruela del mono en Perú

10 de octubre de 2022

«Yo soy Jonathan. Hoy no voy a hablaros de cómo me contagié de la viruela del mono. Simplemente quiero haceros comprender lo difícil que es convivir con esta enfermedad», relata Jonathan Albinagorta, activista y travesti. Jonathan también es conocido como Samantha Braxton, uno de los influencers que brinda su apoyo al Ministerio de Sanidad en su campaña de vídeos para la prevención de la viruela del mono en Perú.

Con más de 2300 casos confirmados de viruela del mono a finales de septiembre, Perú alcanzó la tasa de infección más alta del mundo por millón de personas, según Our World in Data, una plataforma colaborativa en línea dirigida por investigadores de la Universidad de Oxford.

La respuesta al brote en Perú se llevó a cabo bajo el liderazgo del equipo nacional de estrategia contra el VIH, que desarrolló un plan para concienciar sobre la enfermedad. Su panel de datos público en tiempo real, inspirado en la respuesta a la COVID-19, proporcionó pruebas concretas para la rápida campaña de concienciación. Sin embargo, los mismos datos, principalmente de centros especializados en el VIH, también tuvieron el efecto secundario no deseado de aumentar el estigma y la discriminación hacia algunos grupos de personas.

«Los datos crearon una muestra sesgada al principio. Las pruebas demostraron que las personas que viven con el VIH y algunos grupos de población clave, como los gais, se encontraban entre los más afectados en Perú», recuerda Andrea Boccardi, directora de ONUSIDA para Perú, Bolivia, Ecuador y Colombia. «Pero lo cierto es que estas son las personas que acostumbran a acudir a los servicios relacionados con el VIH para hacer sus consultas, realizarse chequeos  periódicos y recibir su tratamiento para el VIH».

Los Centros de referencia para infecciones de transmisión sexual, conocidos como Cerits, y las Unidades Periódicas de Atención Sanitaria acercan los servicios para el VIH a los grupos de población clave y más vulnerables de Perú. «Estos grupos de personas no suelen ir a los hospitales, ya que allí acostumbran a ser víctimas de una gran discriminación. Por el contrario, se dirigen a estos centros, de donde procede el mayor número de casos de viruela del mono diagnosticados al comienzo», explica Boccardi.

La experiencia con la pandemia del VIH nos dice que los datos deben ir acompañados de una información adecuada, y que se han de compartir con el público y los grupos afectados de una forma que no alimente el estigma. El enfoque inclusivo y el uso correcto del lenguaje son claves para interactuar con las comunidades, de modo que, en lugar de ser apartadas, se conviertan en una parte integral de la respuesta.

ONUSIDA apoyó al país para establecer rápidamente una estrategia que incluía encuentros entre los funcionarios sanitarios y los representantes de la sociedad civil. Los líderes comunitarios también contribuyeron revisando los mensajes procedentes del Ministerio de Sanidad.  La gente también recibió formación para actuar como portavoces en entrevistas con los medios de comunicación.  

«A menudo, la comunicación que llega del Ministerio de Sanidad acostumbra a ser muy institucional o bastante distante. Un mensaje que la comunidad no es capaz de asimilar», advierte Mauricio Guitierrez, activista de la red GayLatino. «Hemos elaborado materiales visuales fáciles de usar para la difusión. Es importante traducir y personalizar la información para que llegue a las personas, y eso fue lo que intentamos hacer cuando decidimos prestar nuestro apoyo al Ministerio en estas campañas».

«Además de informar y diagnosticar clínicamente a las poblaciones con mayor riesgo en saunas, hoteles y otros centros, el grupo de trabajo en relación con la viruela del mono convenció a los alcaldes para que mantuvieran estos establecimientos abiertos y los utilizaran como plataformas críticas para la difusión de información relevante sobre la viruela del mono, con el fin de acercar a la gente a la información y poner a su disposición los servicios existentes».

En Perú, las personas LGBTIQ+ y las personas que viven con el VIH son las más discriminadas, ya que el 71 % y el 70 % de ellas, respectivamente, afirman haber sufrido discriminación en algún nivel, según la Encuesta Nacional de Derechos Humanos publicada en 2021 por el Ministerio de Justicia e Ipsos Perú.

«Por miedo al estigma y al qué dirán, muchos de nosotros evitamos preguntar y caemos en la trampa de la ignorancia», confiesa Albinagorta. «Fue estupendo que el Ministerio colocara códigos QR en establecimientos LGBT, por ejemplo».

Las alianzas con empresas de telecomunicaciones y aplicaciones de redes sociales, como Grindr, hicieron posible informar a las poblaciones más vulnerables a través de aproximadamente 40 millones de mensajes centrados en la prevención y el tratamiento de la viruela del mono. Los antiguos espacios empleados para la COVID-19 también se utilizaron para el periodo de aislamiento de 21 días de las personas que no tenían donde guardar  cuarentena, incluidos los migrantes y refugiados.

Pese a que sí ha habido algún primer signo de estabilización, la Organización Panamericana de la Salud (PAHO) avisó recientemente de que es demasiado pronto para proclamar victoria. Así, instó a los países a «intensificar las acciones de respuesta, priorizando la detección, la vigilancia y el compromiso de la comunidad para reducir nuevos casos y poner fin al brote en la región». Los Estados Unidos siguen albergando más de la mitad de todos los casos, pero en el último mes se han observado aumentos rápidos en Brasil, Perú, Colombia, México y Chile.

El Ministerio de Salud del Perú está comprando vacunas a través del Fondo Estratégico de la PAHO, pero el número total de vacunas disponibles para toda la región es de 100 000.  De esta forma, los principales retos a los que nos enfrentamos son los criterios de priorización, ya que el número previsto de vacunas por país no será superior a 5000.

«Fueron muchas las personas que se pusieron en contacto conmigo después del primer vídeo que hice para el Ministerio de Sanidad de Perú. A quienes son más reacios, les inspira más confianza conocer a alguien como yo, que se ha contagiado de la viruela del mono y habla libremente al respecto, que acudir a un hospital, una institución o al propio ministerio», destaca Samantha. «Por supuesto, también hay detractores. De hecho, hay quienes creen que, cuando un hombre gay comparte que ha tenido la viruela del mono, se está estigmatizando a sí mismo. Pero no es así, en absoluto es así».

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Municipalidad de Lima firmó la Declaración de París para tomar acciones aceleradas a nivel municipal para mejorar la calidad de vida de las personas con VIH

18 de diciembre de 2020

En conmemoración del Dia Mundial del SIDA 2020, la Directora de la Oficina del Programa Conjunto de las Naciones Unidas para el VIH/Sida (ONUSIDA) en el Perú, la Dra. Andrea Boccardi Vidarte y el Sr. Jorge Muñoz Wells, Alcalde de la Municipalidad Metropolitana de Lima, firmaron la Declaración de París para tomar acciones aceleradas a nivel municipal a fin de mejorar la calidad de vida de las personas con y afectadas por el VIH en la ciudad de Lima y contribuir al alcance de la meta global de terminar con el SIDA como problema de salud pública para el 2030, y cumplir con el Objetivos de Desarrollo Sostenible 3.3 y 17. La municipalidades peruanas de Lima y Callao – la cual también firmó la Declaración de Paris en julio de este año – concentran el 30% de la población del país y el 70% de casos de VIH notificados en Perú hasta la fecha.

Los gobiernos municipales se encuentran en una situación privilegiada para acelerar las acciones locales para ponerle fin a las epidemias del VIH, tuberculosis,  hepatitis viral y COVID-19 en todo el mundo para el año 2030.

Esta declaración que ha sido firmada por más de 300 ciudades y municipalidades desde 2014, incluye diez compromisos destinados a facilitar el acceso a servicios de prevención, tratamiento, atención y apoyo de calidad que salve y mejore la calidad de vida de personas con el VIH y afectadas por la tuberculosis (TB) y hepatitis viral, migrantes y poblaciones marginalizadas y vulnerables al VIH en el contexto de la epidemia de la COVID-19. Integrar estos servicios con los de salud sexual, reproductiva y mental es fundamental para lograr el acceso universal a la atención médica.

En el año 2020, la COVID-19 ha puesto sobre la mesa una vez más que la salud se interrelaciona directamente con la desigualdad, el respeto por los derechos humanos, la igualdad de género, la protección social y el crecimiento económico.

En el Dia Mundial del Sida, la Municipalidad de Lima se une a los esfuerzos para no dejar nadie atrás en la respuesta al VIH como lo expresa el lema de este año Solidaridad mundial, responsabilidad compartida.

Nuestra acción

Ciudades

Las injusticias a las que se enfrentan las mujeres transgénero en Perú

26 de abril de 2018

Tamara, una mujer transgénero de Lima (Perú), lleva luchando con su identidad desde la escuela primaria, donde  sus compañeros le acosaban desorbitadamente hasta que tuvo que marcharse. Cuando tenía 18 años, a causa de las pocas opciones que tenía, comenzó a trabajar en las calles como trabajadora sexual. A menudo decía que no iba a pasar de los 30 años; se preguntaba con rabia que si la sociedad la estaba tratando como un ser inferior, ¿cómo podría conseguirlo?

Como si se tratase de una profecía, Tamara murió menos de un mes después de su 30 cumpleaños por una enfermedad relacionada con el SIDA y la tuberculosis. Su muerte a una edad tan temprana es tristemente común, de ahí que la mayoría de las mujeres transgénero en América Latina muera antes de llegar a los 35 años. América Latina lidera el mundo en homicidios de personas transgénero, casi el 80 % de los asesinatos de personas transgénero a nivel mundial ocurren en la región. Según un reciente estudio de la Revista de la Sociedad Internacional del SIDA, la prevalencia del VIH entre las mujeres transgénero es superior al 38 %  —las mujeres transgénero tienen un 50 % más probabilidades de adquirir el VIH que el resto de la población.

Las violaciones de los derechos humanos perpetradas contra mujeres transgénero a lo largo de América Latina son el resultado de la presión que existe en su sociedad. La cultura de la región es muy machista, conservadora y transfóbica, de forma que margina y estigmatiza a las personas transgénero, lo que supone una grave amenaza para su salud, seguridad, esperanza de vida y perspectivas de empleo. Como se ven con un apoyo y opciones escasos, muchas se deciden ser trabajadoras sexuales. Siendo trabajadores sexuales no tienen protección legal y corren un mayor riesgo de sufrir violencia y abuso sexual y de sustancias, además, la mayoría tienen poco acceso a los servicios de salud. Muchos de los casos de violencia y asesinato no se documentan y no hay un reconocimiento al respecto.

Durante los últimos años, la fotoperiodista Danielle Villasana ha documentado una comunidad de mujeres transgénero en Lima, fotografiando las terribles realidades a las que se enfrentan con frecuencia como las complicaciones del VIH, el abuso a manos de la policía, de parejas o de clientes y la muerte. "La mayoría de los gobiernos de América Latina y del mundo  no protegen continuamente a las mujeres transgénero, por lo que estoy decidida a mostrar cómo estas injusticias tan ignoradas a menudo provocan consecuencias fatales" dijo la Sra. Villasana.

Como resultado, ha lanzado una campaña en Kickstarter para publicar estas importantes historias en un fotolibro bilingüe. El objetivo es sensibilizar a la policía, la instituciones médicas y a los legisladores. Según cuenta, los sectores a menudo son ignorantes en cuanto a los abusos cometidos contra mujeres transgénero debido a los prejuicios institucionales y a una falta de comprensión. Puedes apoyar y aprender más sobre su proyecto de libro en http://bit.ly/a-light-inside.

Desde una edad temprana, las personas transgénero se enfrentan al estigma, la discriminación y el rechazo social en sus hogares y comunidades. Dicha discriminación, violencia y criminalización son los factores que evitan que las personas transgénero reciban los servicios de VIH que necesitan para mantenerse sanos. ONUSIDA está trabajando con gobiernos, socios y  comunidades de personas transgénero para aumentar el acceso de personas transgénero a los servicios sanitarios.

Todas las fotos han sido realizadas por Danielle Villasana

Danielle Villasana

Fotolibro

Prevenir el VIH entre las mujeres transgénero en Lima

24 de noviembre de 2016

Las mujeres transgénero se enfrentan a grandes obstáculos que limitan su acceso a servicios sanitarios o aumentan su vulnerabilidad al VIH: el estigma, la discriminación, la  violencia de género y las desigualdades de género. Como consecuencia, el porcentaje de mujeres transgénero que acceden a servicios de tratamiento y prevención del VIH es muy bajo.

Para reducir las carencias en materia de prevención del VIH en la población transgénero, el Ministerio de Salud peruano organizó una consulta nacional en colaboración con la Universidad peruana Cayetano Heredia y ONUSIDA acerca de la prevención combinada del VIH en el año 2014.  Esta consulta abrió un diálogo entre los interesados directos y los líderes comunitarios sobre el futuro de la prevención del VIH en Perú. Durante la consulta, el Ministerio de Salud expresó su compromiso para mejorar la programación de la prevención combinada del VIH enfocada a las mujeres transgénero. En 2015 lanzó un plan estratégico específico para la prevención y la atención integral del VIH y de otras infecciones de transmisión sexual (ITS) destinado a las mujeres transgénero.

El plan aborda las principales causas de la epidemia del VIH entre las mujeres transgénero en Perú, incluyendo su precario nivel socioeconómico, su complicado día a día,  el mal ambiente de trabajo y la baja accesibilidad a los servicios de salud. En este plan es de especial importancia la identificación de estrategias efectivas para así responder a los desafíos específicos en materia legal y de derechos humanos, el estigma y la violencia. El desarrollo de este plan resulta de un proceso de  producción de pruebas a lo largo de una década, así como de diálogo político y de reforzamiento de las capacidades de la comunidad transgénero.

El plan se está llevando a cabo en la práctica. Algunas de las actividades que ya se han aplicado son programas de formación especiales para el personal sanitario de centros de tratamiento de ITS y para educadores de la comunidad. La formación se centra en la atención de las necesidades de las personas transgénero en relación con el VIH, la prestación de servicios de prevención, (preservativos y lubricantes), las pruebas del VIH, la vinculación a los servicios sanitarios para la terapia antirretrovírica y la sensibilización de las fuerzas del orden sobre los derechos humanos y la prevención de la violencia de género en la comunidad transgénero.

Mao, activista que defiende los derechos de las mujeres transgénero y educadora del Ministerio de Salud, afirmó que "el plan está enfocado a acercar estos servicios a la comunidad. Algunas mujeres transgénero que no podían ir a los centros de tratamiento de infecciones de transmisión sexual ahora piden preservativos y pruebas, así como poder obtener información y acceso a servicios integrales de salud. Estamos orgullosos de formar parte de esta iniciativa”.

La siguiente fase del plan de salud para las personas transgénero incluirá un aumento del número de lugares descentralizados donde obtener servicios de prevención y tratamiento, así como un estudio de prueba sobre la profilaxis previa a la exposición. El plan se incorporará y adaptará al programa nacional de VIH.

La exposición 'Yo tengo derechos' muestra la vida de las personas transgénero en Perú

22 de febrero de 2016

Las personas transgénero a menudo se enfrentan a la violencia, el desempleo y la pobreza, debido a la ignorancia y el prejuicio. Este tipo de estigma y discriminación expone a las mujeres transgénero a un mayor riesgo de infección por el VIH.

Todas las personas son iguales y nadie debe ser objeto de discriminación por ningún motivo. "En nuestro país se tardará mucho en hacer realidad esta afirmación", dijo el Defensor del Pueblo del Perú, Eduardo Vega Luna, en respuesta a la situación. Sin embargo, pidió "más campañas de sensibilización, que animen a los ciudadanos a mirar el futuro con esperanza y sin violencia ni discriminación."

Algunas organizaciones de las Naciones Unidas en el Perú, como ONUSIDA, PNUD, ACNUDH y el Centro de Información de las Naciones Unidas, llevaron a cabo recientemente una actividad de este tipo junto con  organizaciones de la sociedad civil como PROMSEX, IESSDEH, Centro de Investigación Interdisciplinaria en Sexualidad, Sida y Sociedad de la Universidad Cayetano Heredia, las personas transgénero, la Fundación Magnum y la Unión Europea. La exposición Yo tengo derechos presentó fotografías tomadas por Danielle Villasana, una fotoperiodista galardonada cuyo trabajo se centra en el género, la identidad, la salud y la política social. Recién graduada por la Universidad de Texas en Austin, ha trabajado con las comunidades transgénero desde 2012.

Las fotografías de la exposición —parte de la campaña de las Naciones Unidas Libres e iguales, que aboga por la igualdad para los gays, lesbianas, bisexuales y transexuales— muestran a gente transgénero con sus colegas y miembros de la familia en su vida cotidiana como estudiantes, artistas, profesionales y activistas. En sus testimonios para la exposición, las personas transgénero hablaron acerca de la felicidad, el amor y cómo hacer frente a las luchas diarias.

María del Carmen Sacasa, Coordinadora Residente de las Naciones Unidas en el Perú, dijo: "Para nosotros, el tema principal de los derechos humanos es la no discriminación. No es un tema menor, sobre todo cuando se trata de las personas transgénero, que son rechazadas en muchos ámbitos". La exposición recuerda a las personas uno de los principios fundamentales de los derechos humanos: la discriminación es inaceptable.

Los cambios en el Código Penal de Perú permitirán el acceso de más jóvenes a los servicios relacionados con el VIH

12 de febrero de 2013

De acuerdo con el Código Penal revisado, los jóvenes de entre 14 y 18 años podrán ejercer sus derechos sexuales y reproductivos.
Fotografía: ONUSIDA

El Tribunal Constitucional de Perú enmienda un artículo de su Código Penal que durante muchos años ha penalizado las relaciones sexuales consentidas entre jóvenes. La sentencia era especialmente severa con los adolescentes, que se enfrentaban a penas de hasta 30 años de prisión. El artículo 173 del Código Penal también impedía que los jóvenes accedieran a los servicios esenciales de salud sexual y reproductiva por miedo a ser acusados.

De acuerdo con el Código Penal revisado, los jóvenes de entre 14 y 18 años podrán ejercer sus derechos sexuales y reproductivos siempre y cuando ambas partes lo consientan. Las relaciones sexuales no consentidas seguirán constituyendo un delito en Perú y se impondrán penas de larga duración para los culpables.

"La resolución del Tribunal Constitucional genera un efecto protector en relación con los adolescentes, ya que les proporciona un mejor acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva, así como orientación e información para evitar infecciones de transmisión sexual, incluyendo el VIH", afirmó Mima Barnechea, del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).

En 2012, UNFPA y ONUSIDA presentaron una solicitud oficial ante el Tribunal Constitucional abogando por la declaración de inconstitucionalidad del artículo 173.  Este proceso formaba parte de un esfuerzo más amplio, especialmente de la Defensoría del Pueblo de Perú, de Eduardo Vega Luna y de las exigencias legales presentadas ante el Tribunal por más de 10.000 peruanos.

Esta decisión constituye un hito que sienta las bases de los planes y programas a nivel nacional para evitar el embarazo de adolescentes y reducir las infecciones de transmisión sexual (entre ellas, el VIH) y la mortalidad materna

Carlos Tacuri Calderón, joven activista en Perú y miembro de INPPARES

"ONUSIDA acoge con agrado la decisión del Tribunal Constitucional y felicita a los magistrados por su determinación para proteger los derechos humanos de los adolescentes", afirmó Regina Castillo, coordinadora de ONUSIDA en Perú y Bolivia. "La decisión del Tribunal refuerza el derecho de los jóvenes a tomar decisiones en cuanto a su salud y sexualidad y la necesidad de elaborar políticas y programas que les reconozcan como agentes activos del cambio".

Según la Encuesta Nacional de Demografía y Salud de 2011, un gran porcentaje de peruanos inician sus relaciones sexuales antes de los 18 años.  Más del 12% de las adolescentes (de entre 15 y 19 años) han estado embarazadas al menos en una ocasión.

"Esta decisión constituye un hito que sienta las bases de los planes y programas a nivel nacional para evitar el embarazo de adolescentes y reducir las infecciones de transmisión sexual, entre ellas el VIH, y la mortalidad materna", declaró Carlos Tacuri Calderón, joven activista en Perú y miembro de INPPARES.

ONUSIDA calcula que aproximadamente la mitad de las cerca de 74.000 personas que viven con el VIH en Perú se infectaron antes de los 20 años. Esta situación acentúa la necesitad de sensibilizar sobre el VIH y sus modos de transmisión entre los adolescentes. En diciembre de 2012 el Ministerio de Sanidad, en colaboración con ONUSIDA y otros asociados, lanzaron la campaña "Hazte la prueba del VIH: es mejor saberlo" (en inglés "take an HIV test––it’s better to know"), que pretendía llegar a los jóvenes con mensajes clave de prevención sobre el VIH y que ofrecía pruebas del VIH gratuitas.

Perú lanza una campaña para aumentar la realización de las pruebas del VIH entre los hombres

29 de noviembre de 2012

José del Carmen Sara, viceministro de Sanidad, presentando la campaña “Es mejor saber: Hazte la prueba del VIH".

En los días previos al Día Mundial del Sida de este año, el Ministerio de Sanidad de Perú en colaboración con la asociación Dignidad, en colaboración con ONUSIDA y la organización de Salud Panamericana de la Salud (PAHO), presentaron la campaña “Es mejor saber: Hazte la prueba del VIH.” La iniciativa pretende aumentar la cobertura de las pruebas del VIH en el país, especialmente entre los hombres, ofreciendo pruebas del VIH gratuitas.

Los hombres de entre 18 y 25 años son el principal foco de la campaña, que pretende realizar la prueba a 10.000 personas hasta el 1 de diciembre (el Día Mundial del Sida). Las pruebas se realizarán en 16 lugares diferentes establecidos por el Ministerio, incluidas varias universidades, a fin de llegar al mayor número de hombres jóvenes posible.

"El Ministerio de Sanidad realiza este esfuerzo para que las pruebas del VIH sean más accesibles a los hombres", dijo el viceministro de Sanidad, José del Carmen Sara durante el evento.

En Perú hay 74.000 personas que viven con el VIH, y el 77% de ellas son hombres. El 56% de las nuevas infecciones se produce en hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y 9 de cada 10 mujeres contraen el VIH de sus parejas estables, que tienen conductas de alto riesgo, comprando sexo o teniendo sexo con otros hombres. Se estima que la mitad de las personas que viven con el VIH en Perú se infectó antes de cumplir los 21 años.

Aunque los hombres tienen un mayor riesgo de infectarse por el VIH que las mujeres, tradicionalmente el acceso de aquellos a los servicios sanitarios ha sido inferior. A pesar de que 3 de cada 4 personas que viven con el VIH son hombres, solo el 7% de ellos notificó haberse hecho las pruebas del VIH en 2008. El aumento de las pruebas ofrecerá mayores oportunidades de prevención y de tratamiento temprano del VIH.

El Ministerio de Sanidad realiza este esfuerzo para que las pruebas del VIH sean más accesibles a los hombres.

José del Carmen Sara, viceministro de Sanidad de Perú

Perú introdujo las pruebas rápidas y el asesoramiento sobre el VIH para las mujeres embarazadas en 2006 y en 2008 se organizó una campaña de realización de pruebas y de asesoramiento sobre el VIH a gran escala centrada en las mujeres en edad fértil. Ese mismo año, el Ministerio de Sanidad aumentó además el acceso a las pruebas y al asesoramiento sobre el VIH para los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, transexuales y profesionales del sexo, pero hasta la fecha las pruebas del VIH solo han sido gratuitas para las mujeres.

"La mitad de las personas que viven con el VIH en Perú desconocen su estado serológico. Es importante salvar vidas aumentando el acceso al diagnóstico y al tratamiento del VIH", dijo Regina Castillo, coordinadora de país para Perú y Bolivia de ONUSIDA.

La presentación del 21 de noviembre reunió a personas que viven con el VIH, representantes de las Naciones Unidas, responsables del gobierno, periodistas, organizaciones internacionales y renombrados artistas, incluido el presentador y activista contra el VIH, Ernesto Pimentel, y la cantante, Eva Ayllón.

Perú: Nueva campaña para contrarrestar el estigma y la discriminación hacia las personas que viven con el VIH

11 de diciembre de 2009

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Luis Agois, presidente del Consejo de la prensa peruana; Renate Ehmer, coordinadora de ONUSIDA para el Perú, Ecuador and Bolivia, y Jorge Chediek, representante residente del sistema de las Naciones Unidas, en el lanzamiento de la nueva campaña. Foto: ONUSIDA/PNUD/CPP

En Perú 76.000 personas viven con el VIH. Mientras que la prevalencia del VIH en la población general es relativamente baja, se sitúa en un 0,5%, los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y las comunidades transexuales han sido muy azotados por la epidemia, con una prevalencia que se calcula en un 10,8% y 32% respectivamente.

Debido a los distintos prejuicios sociales existentes, las personas que viven con el VIH suelen ser a menudo objeto de discriminación en el lugar de trabajo y en toda la sociedad.

Por este motivo, para contrarrestar el estigma hacia las personas que viven con el VIH en el Perú, en noviembre de 2009 se lanzó una nueva campaña, iniciativa conjunta de ONUSIDA, PNUD y el Consejo de la prensa peruana.

La campaña multimedia, que lleva el nombre de "Una imagen contra el estigma y la discriminación causados por el VIH/sida", tiene como propósito crear un entorno de apoyo a las personas que viven con el VIH y en el que no haya cabida para la discriminación y el miedo.

 Durante la presentación, Luis Agois, presidente del Consejo de la prensa peruana, destacó el importante papel que pueden desempeñar los medios. En este sentido, señaló que «nuestra contribución es una masiva difusión del mensaje, iniciativa a la que también se han acoplado gustosos medios de la prensa peruana en general».

Según Jorge Chediek, representante residente del sistema de las Naciones Unidas, el miedo a las repercusiones sociales y a la discriminación que puedan surgir tras dar positivo en las pruebas del VIH hace que un gran número de peruanos evite saber su estado serológico y, por consiguiente, arriesgue aún más su salud. «Como consecuencia, no pueden acceder al tratamiento, que en el caso del Perú es gratuito».

Las organizaciones de la sociedad civil estiman que se produce un número cada vez más elevado de crímenes de odio al año, la mayoría de los cuales quedan impunes.

Renate Ehmer, coordinadora de ONUSIDA para el Perú, Ecuador and Bolivia

Por su parte, Renate Ehmer, coordinadora de ONUSIDA para el Perú, Ecuador y Bolivia, centró su presentación en la violencia derivada de las manifestaciones extremas del estigma y de la discriminación, y habló de «cuando se asesinan a ciudadanas y ciudadanos a causa de su orientación sexual, los llamados crímenes de odio».

Asimismo, advirtió de que «las organizaciones de la sociedad civil estiman que se produce un número cada vez más elevado de crímenes de odio al año, la mayoría de los cuales quedan impunes».

La campaña congrega a personajes públicos de renombre de la sociedad peruana y a personas que viven con el VIH, y todos aparecen fotografiados juntos en posters y folletos distribuidos a lo largo y ancho del país. 

Entre los participantes de gran renombre están  Javier Velasquez Quesquen, presidente del Consejo de ministros; Javier Villa Stein, presidente de la Corte Suprema de Justicia; Oscar Ugarte, ministro de sanidad; Jose Antonio Garcia Belaunde, ministro de asuntos exteriores; Antonio Brack, ministro de medio ambiente; Monseñor Bambaren, y Nolberto Solano, así como futbolistas, componentes del grupo de música Grupo 5, el humorista Carlos Alvarez, y  el economista Hernando de Soto.

Como parte de la campaña se han producido dos cortos que se pueden ver aquí:
Una imagen contra el estigma y la discriminación causados por el VIH/sida vol 1
Una imagen contra el estigma y la discriminación causados por el VIH/sida vol 2

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