GINEBRA, 7 de julio de 2020 - El último informe sobre el progreso para la consecución de los objetivos Start Free, Stay Free, AIDS Free muestra que, a pesar del gran avance logrado desde los primeros días de la epidemia, la respuesta al sida centrada en los niños se mantiene en posición rezagada. Año tras año se sigue sin alcanzar el gran objetivo de eliminar las nuevas infecciones entre los niños, y los más pequeños siguen muriendo innecesariamente como consecuencia de enfermedades relacionadas con el sida. Muertes que podrían evitarse con tratamientos sencillos y económicos si se diagnosticara y tratara a tiempo a los más pequeños de la sociedad.
«Supone una auténtica tragedia el ver que disponemos de muchísimas herramientas, el saber que se han evitado muchas nuevas infecciones entre niños, el comprobar que son muchos los niños seropositivos que están bien, mientras que hay muchos otros muriendo sin disfrutar de ningún paso de los que hemos dado hacia adelante», expresa Winnie Byanyima, Directora Ejecutiva de ONUSIDA. «Nos negamos a aceptar que cada año decenas de miles de niños sigan infectándose por el VIH y muriendo como consecuencia de enfermedades relacionadas con el sida».
El marco Start Free, Stay Free, AIDS Free parte de tres conceptos sencillos. En primer lugar, los bebés tienen derecho a llegar al mundo libres del VIH (Start Free). En segundo lugar, mediante la prevención del VIH, los niños, los adolescentes y las mujeres jóvenes tienen derecho a permanecer libres del virus (Stay Free). En tercer lugar, los niños y adolescentes que contraen el VIH tienen todo el derecho a ser diagnosticados, tratados y cuidados, para que permanezcan libres de sida todo el tiempo (AIDS Free).
Todos los países del globo han mostrado su acuerdo respecto a establecer objetivos relacionados con la prevención y el tratamiento. Con el fin de que los niños empiecen sus vidas libres del VIH, uno de los objetivos consistía en reducir el número de nuevas infecciones infantiles por el VIH a menos de 40 000 para 2018, y a 20 000 para el año 2020. Sin embargo, de acuerdo con los últimos datos publicados, en 2019 se infectaron 150 000 niños, cifra que supone una reducción desde el año 2010, pero que sigue siendo cuatro veces superior al objetivo fijado para 2018.
Si se garantiza que las mujeres embarazadas que viven con el VIH sean diagnosticadas a tiempo, empiecen su tratamiento y se mantengan adheridas a la terapia antirretrovírica durante el embarazo, el parto y la lactancia, las posibilidades de que transmitan el virus están por debajo del 1 %. En todo el mundo, en el año 2019 recibió tratamiento antirretrovírico el 85 % de las mujeres que viven con el VIH. Pese a esa elevada cobertura, los niños se siguen infectando debido al desigual acceso a los servicios de tratamiento (principalmente en África occidental y central), las mujeres no reciben las atenciones necesarias, y las embarazadas y las lactantes contraen el VIH.
«Como comunidad global, hemos avanzado ingentemente para controlar la pandemia del VIH, pero todavía tenemos pendiente llegar a muchos niños, adolescentes y mujeres jóvenes», insistió Angeli Achrekar, subdirectora y coordinadora en materia de sida mundial en Estados Unidos, y responsable del Plan de emergencia del presidente de los Estados Unidos para el alivio del sida (PEPFAR). «Debemos redoblar esfuerzos todos para llegar de manera inmediata a todas esas poblaciones críticas. PEPFAR sigue plenamente comprometido con llevar a cabo su parte».
El componente stay-free (mantente sin) fija el objetivo de reducir las nuevas infecciones por el VIH entre chicas adolescentes y mujeres jóvenes a menos de 100 000 para el año 2020. Las chicas adolescentes y las mujeres jóvenes llevan mucho tiempo siendo, con gran diferencia, las más afectadas por el VIH en los países más centrados en la iniciativa Start Free, Stay Free, AIDS Free. Las chicas adolescentes y las mujeres jóvenes son el 10 % de toda la población, pero representan el 25 % de las nuevas infecciones por el VIH, y corren casi dos veces el mismo riesgo de contraer la infección por el VIH que sus coetáneos masculinos. No obstante, las nuevas infecciones entre las mujeres jóvenes sí han descendido. En Sudáfrica, donde se combinan distintos programas de prevención para chicas adolescentes y mujeres jóvenes, las nuevas infecciones entre este grupo de edad han caído en torno a un 35 %. Y en Eswatini, las nuevas infecciones por el VIH entre las mujeres jóvenes de 15-24 años han caído en torno a un 54 %.
«Durante muchísimo tiempo, la respuesta al VIH se ha pasado por alto en el caso de los niños, las chicas adolescentes y las mujeres jóvenes», recalca Henrietta Fore, directora ejecutiva del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. «Mas albergamos esperanza. El impulso reciente para reducir las nuevas infecciones entre chicas adolescentes y mujeres jóvenes que se está observando en países como Eswatini y Sudáfrica nos demuestra todo lo que es posible conseguir cuando los Gobiernos y las comunidades, lideradas por las propias chicas, aúnan fuerzas. No podemos permitir que la COVID-19 y el viento en contra que trae consigo nos hagan aminorar la marcha. Debemos permanecer fuertes y ambiciosos en nuestro esfuerzo conjunto por garantizar que la siguiente generación de niños nazca libre del VIH y el sida».
Para que los niños y los adolescentes vivan AIDS-free (libres de sida), los países llaman a establecer objetivos ambiciosos, pero realistas, con relación al tratamiento infantil para el VIH: para el año 2020, administrar un tratamiento antirretrovírico a los 1,4 millones de niños que viven con el VIH. En el año 2019, sin embargo, solo 950 000 (53 %) de los 1,8 millones de pequeños que viven con el VIH recibieron tratamiento antirretrovírico, una cifra muy inferior al 67 % de los adultos que están en tratamiento. Está claro que, para salvar vidas, los 840 000 menores que no están en tratamiento (aproximadamente dos tercios de los que se calcula que hay de entre 5 y 14 años) deben ser diagnosticados y tratados con carácter urgente.
«La falta de medicamentos para el VIH óptimos con formulaciones pediátricas adecuadas lleva siendo desde hace años una gran barrera para mejorar los resultados en salud de los niños que viven con el VIH, y lleva a la baja cobertura del tratamiento», explica Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud. «El acceso a los servicios para los grupos vulnerables se debe expandir mediante un compromiso de la comunidad más sólido, un mejor suministro de servicios, y un gran esfuerzo para poner fin al estigma y la discriminación».
A pesar de todos los fracasos, la buena noticia es que sí sabemos de qué manera el mundo podría alcanzar los objetivos de Start Free, Stay Free, AIDS Free. Y comprometiéndonos como debemos, aún podemos salvar los obstáculos que nos impiden lograr los objetivos y revertir los fracasos.
«La década pasada ha estado marcada por la innovación y el progreso en el campo del VIH pediátrico. Sin embargo, el enorme incumplimiento de los objetivos para con los niños que se refleja en el último informe es plenamente inadmisible. Debemos renovar, de forma urgente, nuestro compromiso para luchar por una generación libre de sida. Sin embargo, hoy en día, como comunidad mundial, estamos fallando a todos aquellos más vulnerables que están a nuestro alrededor: los niños y los jóvenes», apuntó Elizabeth Glaser, presidenta y directora ejecutiva de Pediatric AIDS Foundation.
«Podemos hacerlo mejor. Debemos hacerlo mejor», añadió la Sra. Byanyima. «Sabemos bien cómo salvar vidas y frenar el número de nuevas infecciones ente los niños. Solo pido que no escatimemos esfuerzos. Todo lo que suponga hacer algo menos es una vergüenza por nuestra parte».
ONUSIDA y el Plan de emergencia del presidente de los Estados Unidos para el alivio del sida lanzaron la iniciativa Start Free, Stay Free, AIDS Free en 2016 con el fin de integrar los logros del Plan mundial para eliminar las nuevas infecciones por VIH en niños para el 2015 y para mantener con vida a sus madres, el cual terminó en 2015.
ONUSIDA
El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) lidera e inspira al mundo para hacer realidad su meta global de cero nuevas infecciones por el VIH, cero discriminación y cero muertes relacionadas con el sida. ONUSIDA aúna los esfuerzos de 11 organizaciones de las Naciones Unidas (ACNUR, UNICEF, PMA, PNUD, UNFPA, UNODC, ONU Mujeres, OIT, UNESCO, OMS y Banco Mundial) y trabaja en estrecha colaboración con asociados mundiales y nacionales para poner fin a la epidemia de sida para el 2030 como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Obtenga más información en unaids.org y conecte con nosotros a través de Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.