GINEBRA, 15 de mayo de 2024—Antes de IDAHOBIT, que se conmemora en todo el mundo el 17 de mayo, ONUSIDA hace un llamamiento a los gobiernos de todo el mundo para que protejan los derechos humanos de las personas LGBTQ+. La protección de los derechos humanos de todas las personas, según demuestran las investigaciones de ONUSIDA, es esencial para proteger la salud pública, ya que permite un acceso inclusivo y equitativo a los servicios sanitarios sin discriminación.
El movimiento en favor de los derechos humanos para todos ha logrado importantes avances. Por ejemplo, mientras que al principio de la pandemia de sida la mayoría de los países criminalizaban a las personas LGBTQ+, ahora dos tercios de los países no lo hacen.
Sin embargo, más de 60 países siguen haciéndolo, mientras que otros 20 criminalizan la expresión y la identidad de género.
"El estigma, la discriminación y la criminalización pueden ser letales", declaró Winnie Byanyima, Directora Ejecutiva de ONUSIDA. "En la respuesta al VIH, hemos aprendido que un enfoque basado en los derechos humanos es fundamental para responder a una crisis sanitaria y no dejar a nadie atrás. Los países deben eliminar estas leyes penales discriminatorias e introducir una legislación que proteja los derechos si queremos acabar con el sida como amenaza para la salud pública de todos."
La discriminación, la violencia y la criminalización obligan a muchas personas LGBTQ+ a pasar a la clandestinidad y a alejarse de los servicios sanitarios; en consecuencia, los hombres homosexuales y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, así como las personas transgénero, se ven más afectados por el VIH. A nivel mundial, en 2022, los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres tenían 23 veces más probabilidades de contraer el VIH, y las mujeres transexuales 20 veces más probabilidades de contraer el VIH que otros adultos de entre 15 y 49 años.
La criminalización de las personas LGBTQ+, en particular, causa importantes daños a la salud. En el África subsahariana, los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres en los países donde se penalizan tienen cinco veces más probabilidades de vivir con el VIH que en los países que no penalizan el comportamiento sexual entre personas del mismo sexo.
Como ha demostrado un reciente informe de IAS - Lancet, las violaciones de los derechos humanos tienen múltiples repercusiones perjudiciales en la salud pública. Tratar a las personas como delincuentes las aleja de servicios vitales por miedo a la detención y la discriminación, lo que provoca que no accedan a la prevención, el tratamiento y la atención del VIH. Además, las estrictas leyes anti-LGBTQ+ se han asociado a una falta de conocimiento sobre las pruebas del VIH y el estado serológico.
"Para demasiadas personas de nuestras comunidades LGBTQ+ y más allá, las cosas más básicas están todavía demasiado lejos de su alcance, debido a la discriminación, el estigma y la violencia a la que se enfrentan cada día", han declarado las cosecretarias generales de la asociación internacional de lesbianas, gays, bisexuales, trans e intersexuales ILGA World, Luz Elena Aranda y Tuisina Ymania Brown. "Por eso se unen tras un grito urgente: 'Que nadie se quede atrás: igualdad, libertad y justicia para todos', recordándonos la importancia de rechazar leyes, políticas y actitudes discriminatorias".
Las leyes penales que discriminan por motivos de orientación sexual e identidad de género constituyen una violación del derecho a la intimidad y a la no discriminación y obstaculizan la respuesta al VIH. ONUSIDA hace un llamamiento a todos los Estados para que deroguen dichas leyes e introduzcan protecciones jurídicas contra la discriminación por motivos de orientación sexual.
ONUSIDA, la Organización Mundial de la Salud, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y la Comisión Mundial sobre el VIH y el Derecho han hecho las mismas recomendaciones, al igual que la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y varios otros organismos de las Naciones Unidas.
ONUSIDA apoya a las personas LGBTQ+ de todo el mundo que se enfrentan al odio, la discriminación y la marginación, y pide que se ponga fin a su criminalización.
ONUSIDA
El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) lidera e inspira al mundo para hacer realidad su meta global de cero nuevas infecciones por el VIH, cero discriminación y cero muertes relacionadas con el sida. ONUSIDA aúna los esfuerzos de 11 organizaciones de las Naciones Unidas (ACNUR, UNICEF, PMA, PNUD, UNFPA, UNODC, ONU Mujeres, OIT, UNESCO, OMS y Banco Mundial) y trabaja en estrecha colaboración con asociados mundiales y nacionales para poner fin a la epidemia de sida para el 2030 como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Obtenga más información en unaids.org y conecte con nosotros a través de Facebook, Twitter, Instagram y YouTube.